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Una vez más vibró el sentimiento patrio en la virtuosa oratoria del Historiador de la ciudad de La Habana, Eusebio Leal Spengler, durante la presentación, este martes, en la sala Nicolás Guillén, de La Cabaña, de dos libros imprescindibles para comprender la dimensión humana del Padre de la Patria: Carlos Manuel de Céspedes. El diario perdido, de su autoría; y la novela El camino de la desobediencia, del joven escritor bayamés Evelio Traba.
Editados bajo el sello Boloña, ambos volúmenes buscan desacralizar al héroe cubano, para así poder valorarlo en toda su plenitud, y no desde la imagen manida que nos aleja de su verdadera altura. «En este libro aparece el Céspedes humano. Con sus debilidades, con sus penas y con su grandeza política», afirmó Leal, quien, además, narró la historia de cómo llegaron a sus manos los manuscritos originales que le fueron entregados por deseo póstumo del periodista José de la Luz León.
Orgulloso de la nueva edición de Carlos Manuel de Céspedes. El diario perdido, el historiador elogió su «cuidado y bello» diseño, a cargo de Claudia Hernández Cabrera, y la minuciosa edición y corrección del también director de Boloña, Mario Cremata Ferrán, los cuales estuvieron junto a Leal en la ceremonia.
También diseñado por Hernández Cabrera, El camino de la desobediencia abarca casi 600 páginas de relato narrativo sobre la vida del fundador bayamés, precedidas por un sublime retrato del prócer, y en su dorso unas palabras que afirman: «Traba se ha conducido según el axioma del escritor Abel Posse, cuando expresó que el novelista debía colarse por las grietas y los silencios que deja la historia».
