Una especialista durante el proceso de producción de estos controladores biológicos. Autor: Eduardo González Publicado: 21/09/2017 | 05:43 pm
PINAR DEL RÍO.— Con la puesta en funcionamiento de un Centro de Reproducción de Entomófagos y Entomopatógenos (CREE), el cual ha liberado hasta la fecha una primera generación de 800 ejemplares de cephalonomias en el área más infestada del macizo cafetalero de la provincia, el territorio potencia una necesaria lucha biológica para contrarrestar las afectaciones de la broca del café, una de las principales plagas que afecta al cultivo.
La institución, única de su tipo en la zona occidental, produce este tipo de medios biológicos y cuenta ya con otra población de alrededor de 200 individuos de cephalonomias, especie de avispa que se introduce en el café y elimina la broca, enfermedad que ha llegado a alcanzar en algunas zonas el 19 por ciento de infestación.
Lograr una producción de cientos de millares de estos insectos es la proyección de la iniciativa, en aras de intensificar la lucha contra la plaga, que tanto afecta los rendimientos cafetaleros en las más de 500 hectáreas destinadas al cultivo en el territorio.
«Estamos apenas en un inicio, pero con el tiempo y un mayor nivel en la elaboración de estos medios biológicos, se pudiera contar con cifras que cubran las necesidades de la provincia y de otros productores de café en el occidente cubano, como en Artemisa y la Isla de la Juventud», declaró Reinier Izquierdo Díaz, director de la UEB de Café de la Empresa Forestal Integral de La Palma, donde está enclavada la institución.
Según reveló Katileyvis Martínez Placencia, especialista principal del centro, el CREE está habilitado para asumir igualmente la cría de gallerías y nemátodos, estos últimos también efectivos en otras siembras como las del arroz y el maíz.
Martínez Placencia explicó que el nemátodo se aplica mediante la fumigación antes de la cosecha y la cephalonomia después de la recogida.
El empleo de estos controladores biológicos elimina el uso de productos químicos, permite ahorrar recursos económicos y evitar daños colaterales al medioambiente.