CAIBARIÉN, Villa Clara.— La cubanísima frutabomba Maradol resulta una de las tres más cultivadas en el mundo, se conoció durante el II Simposio Internacional de raíces, rizomas, tubérculos, plátanos, bananos y papayas.
En el encuentro se expusieron más de 40 trabajos científicos que incluyen métodos para enfrentar plagas y enfermedades, la creación de variedades o mejoramiento de estas, y sobre la protección de los suelos.
Entre las características principales de este fruto, creado por el ya fallecido Adolfo Rodríguez, fundador del Instituto de Investigaciones de Viandas Tropicales (Inivit), se encuentran que es de gran precocidad, posee excelente aroma, color rojo salmón en la pulpa y sabor exquisito, además de ser resistente a la manipulación.
La Doctora en Ciencias Biológicas Arlene Rodríguez Manzano, del Instituto de Investigaciones Fundamentales en la Agricultura Tropical, en su enfoque sociohistórico de la creación y producción de las semillas, destacó que en ese logro genético se pone de manifiesto la importancia del conocimiento, del diálogo de saberes entre científicos y productores, así como del talento innovador de los campesinos cubanos.
El reconocimiento internacional al trabajo del Instituto de Investigaciones de Viandas Tropicales se ha ampliado, lo que lo confirman las exportaciones de semillas y vitroplantas de malanga, ñame y plátano a países de Centroamérica, y sus convenios de colaboración.
El Doctor Nicolás Rose, destacado especialista del Grupo Consultivo sobre Investigación Agrícola Internacional, enfatizó en el Simposio que el prestigio del instituto villaclareño trasciende sus fronteras y se inserta en el esfuerzo mundial por enfrentar la crisis alimentaria, causada por altos precios, la adversidad de los cambios climáticos y otros fenómenos dañinos a la agricultura.
Otras buenas nuevas del encuentro, que concluyó este viernes, es la creación de un nuevo clon de boniato morado, el cual posee propiedades antioxidantes y de alto valor vitamínico y proteico, superior, por ejemplo, al de la papa.
Se recordó en el encuentro que en Japón, donde consumen altas cantidades de este tubérculo, lo consideran un alimento casi perfecto, pues provee una comida ideal cuando se combina con proteínas y lípidos.
Al consumir el boniato de masa blanca y dulce, que prefieren en nuestro país, se ingiere fundamentalmente almidón. De ahí la trascendencia de la introducción del nuevo clon, creado en el Inivit.
También se presentó una nueva variedad de pepino, generalizada ya, que se adapta mejor a nuestras condiciones ambientales y de mayor productividad en comparación con otras en explotación.
Igualmente trascendió que especialistas cubanos desarrollaron un modelo válido para la simulación de la compactación provocada por el tráfico de vehículos agrícolas y propusieron recomendaciones para el manejo sostenible del suelo.