Lisara Corona (al centro) fue electa nueva presidenta de la FEU. Carlos Rangel recibió un reconocimiento por su labor como anterior presidente. Junto a ellos, Liudmila Álamo, primera secretaria de la UJC. Autor: Roberto Morejón Guerra Publicado: 21/09/2017 | 05:24 pm
La Universidad cubana debe ser un bastión de la Revolución. En ella deben primar la ejemplaridad y la disposición al trabajo, a no cansarse ni hacer concepciones de principios, aseguró Roberto Montesinos, jefe del Departamento de Educación y Deportes del Comité Central del Partido, en la última jornada del Consejo Nacional de la Federación Estudiantil Universitaria (FEU), que concluyó este jueves en la capital.
Montesinos exhortó a los jóvenes a pensar y elegir a los dirigentes más representativos de la organización, que sepan llevar la crítica, desde el compromiso con la Universidad y la Revolución.
Liudmila Álamo, primera secretaria de la UJC, significó que el desafío está en sumar, en lograr la participación consciente y real del estudiantado, y recordó que el 60 por ciento de los universitarios militan en la organización de vanguardia de la juventud cubana.
«Debemos cambiar lo que sea necesario, especialmente en el quehacer de las brigadas, para que sus miembros puedan tener más sentido de pertenencia», destacó.
Un momento especial fue la elección del nuevo Secretariado Nacional, integrado por 12 miembros y presidido por Lisara Corona Oliveros, graduada de la Universidad de Ciencias Médicas de La Habana, quien se desempeñaba como vicepresidenta.
En el acto fue reconocido el trabajo de Carlos Rangel Irola como anterior presidente de la FEU, junto a otros estudiantes que terminaron sus labores como dirigentes.