Más de dos millones de árboles, en una extensión de 957 hectáreas, se han sembrado en la capital como parte del programa forestal de este año, que comenzó en mayo y termina en octubre.
Según Isabel Russeau, jefa del Servicio Estatal Nacional Forestal en la ciudad, se han sembrado 19 especies que incluyen maderables como el cedro, la caoba y la majagua, y frutales como el mango, el tamarindo y la guanábana.
«El 12 de septiembre —dijo— realizamos una campaña de reforestación masiva donde se sembraron más de 39 000 árboles, con una gran participación popular. El próximo día 10 vamos a la segunda etapa de esta campaña, cuyo objetivo es reponer aquellos ejemplares que se hayan afectado en el proceso de trasplante.
«Además se van a plantar nuevas áreas y otras se van a enriquecer. Por ejemplo, en la Autopista Nacional, desde áreas periféricas capitalinas hasta la entrada del municipio de San José de las Lajas, donde se hizo una gran siembra, vamos a reponer las matas dañadas y a incorporar frutales, pues ese día el mayor porcentaje de lo que se sembró fue maderable.
«Después de ese día se realizarán periódicamente movilizaciones para salvar lo que cultivamos. Vamos a centrar el esfuerzo en hacer ruedos a las plantas, mantenerlas, tomar medidas contra incendios, porque además las posturas plantadas son pequeñas, necesitan más cariño, y ese cariño se lo debemos dar en el período de sequía que está por venir».