NUEVA GERONA, Isla de la Juventud.— Con la implementación de un moderno sistema chino de jaulas para pollitas de inicio, los avicultores pineros garantizan el ciclo de producción de huevos en menor tiempo y mayor eficiencia.
Migdalia Rives, subdirectora de producción de la empresa avícola, informó que en las actuales condiciones los animales llegan a la fase de desarrollo más rápido porque no gastan energía y la higiene es superior.
«Antes había que esperar 60 días para trasladarlos a la unidad de desarrollo, ahora se hace a los 30 ó 45 días», comentó.
Rives resaltó que tener esta granja de inicio otra vez en el territorio, ahora con capacidad para 100 000 animales, garantiza estabilidad en el ciclo productivo del animal que en 165 días se incorpora como ponedora.
«El huracán Gustav (2008) arrasó la granja que teníamos. Entonces trasladábamos las pollitas desde las provincias de Villa Clara y La Habana, pero venían en edad adulta y en una caja viajaban 12 animales. A eso se sumaban los gastos por concepto de alquiler del transporte (terrestre y marítimo) que elevaban los costos de la producción», explicó.
El viaje hasta la Isla de la Juventud demora unos tres días como mínimo, y ese tiempo atentaba contra la salud del animal que se sometía al estrés por carencia de agua y comida durante la travesía.
Rives recordó que la avicultura en el territorio perdió 56 naves, de ellas se propusieron recuperar 30 por esfuerzo propio de los trabajadores de la empresa, que incluyó la puesta en funcionamiento de una planta incubadora.
Aun cuando sobrecumplen la producción de huevos en relación con el plan previsto, superior a los 60 000, los indicadores de eficiencia están deteriorados porque los animales son viejos. Existen 55 000 en producción de 66 700 que debían.
«Tales deficiencias se deben a que nos vemos obligados a sacar un grupo de ponedoras decrépitas tras un año de producción (fin de su vida productiva), y les limitamos gradualmente el consumo de agua y alimento para luego retornarlas al sistema por seis o siete meses más y ese lapso representa pérdidas», explicó Rives.
No obstante las dificultadas ocasionadas por el clima y el envejecimiento de la masa, el nuevo sistema garantiza más del 90 por ciento de viabilidad al sector avícola pinero, que aporta 12 huevos percápita a la canasta básica y explora hoy otros mercados en frontera consumidor de huevos y carne de codorniz.