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David Wiliams Fonseca desborda alegría y sencillez. Autor: Roberto Suárez Publicado: 21/09/2017 | 04:52 pm
Si como todos los niños, David Williams Fonseca soñó alguna vez con pilotear aviones, ahora con 31 años está muy cerca de cumplirlo. Su trabajo como Técnico de Aviación en el Aeropuerto Internacional José Martí le obliga a estar en contacto directo con las naves, tal vez por eso sus sueños se elevan cada día.
Precisamente en la mañana de este miércoles uno de ellos se cumplió cuando se supo elegido el tercer delegado directo al IX Congreso de la UJC en la capital, en el colectivo de trabajadores de Cubana de Aviación.
«Me siento honrado y orgulloso por recibir este reconocimiento de mis compañeros de trabajo, que representa, a la vez, un gran reto. Como joven, como militante y como revolucionario es mi mayor premio».
Mientras cursaba sus estudios de preuniversitario, David ingresó a la organización con el convencimiento de que podía aportar su granito de arena en la construcción de un mundo mejor. Hoy, como miembro no profesional del Buró de la UJC del municipio de Boyeros, confiesa que no defraudará a los que confiaron en él, pues llevará adelante su compromiso con la juventud cubana.
«Participar en este congreso trascendental para la historia de nuestro país me obliga a proponer, con entereza, temas que conciernen actualmente a los jóvenes, militantes o no. Nosotros necesitamos debatir determinadas cuestiones teniendo en cuenta el contexto económico social en el que vivimos».
La elección de David provocó exclamaciones, aplausos y sonrisas de todos los que, ansiosos, esperaban la noticia. Por ello, Miguel Colina, miembro del Buró Nacional de la UJC, expresó que «esa emoción es una muestra de cuánto el colectivo aprecia su desempeño. Es una muestra de la confianza que han depositado en él y en todos los que lo acompañen en el Congreso. Si todos los delegados son capaces de captar las misiones fundamentales de la juventud cubana y de implicarla en el análisis de las soluciones y propuestas concretas, ya tenemos un buen trecho adelantado».
Cuando lo felicitan su sencillez se desborda, porque reconoce que su elección es también un premio para Cubana de Aviación, al ser uno de los centros elegidos para proponer un delegado directo al Congreso.
La Terminal 1 del Aeropuerto Internacional José Martí fue el escenario en el que los trabajadores de Cubana de Aviación sumaron razones para sentirse orgullosos, porque además se agregó el otorgamiento del Gran premio Ceiba de La Habana, de la Asociación Cubana de Comunicadores Sociales, por su campaña publicitaria con motivo de su aniversario 80.
