El desarrollo de la biometeorología cuenta entre los méritos que le valieron a Villa Clara la sede nacional del Día Mundial del Medio Ambiente
SANTA CLARA.— Quizá muy pocos sistemas de salud en el mundo cuenten con un pronóstico de variables de biometeorología aplicadas para los estados de la salud humana (PronBiomet), que permite alertar sobre inminentes efectos negativos para los asmáticos y los que padecen trastornos cardiovasculares.
Para los médicos resulta trascendente conocer cuándo va a ocurrir un cambio brusco en las condiciones del tiempo porque influyen negativamente en las enfermedades mencionadas.
Consecuentemente les permite alertar con varios días de antelación a los servicios de urgencia sobre el momento en que puede ocurrir una alta incidencia de enfermedades respiratorias y prevenir los recursos necesarios en los cuerpos de guardia.
Está demostrado que los cambios bruscos producen alteraciones significativas en algunos enfermos, aunque tampoco todos reaccionan de igual manera. Pero es una verdad que muchos son receptivos a la abundancia o la escasez de oxígeno, explica el doctor Luis Lecha Estela, investigador del Centro de Estudios y Servicios Ambientales (CESAM).
La cantidad de oxígeno en el aire alcanza valores máximos durante el invierno, aunque esta magnitud cambia diariamente, en dependencia de la presión atmosférica, la temperatura y la humedad del aire.
Al pasar un frente frío aumenta la densidad de oxígeno, proceso llamado hiperoxia, que origina un aumento de asma bronquial y de enfermedades cardiovasculares. El vaticinio acierta casi para el ciento por ciento de los casos de la primera, y en tres cuartas partes en los de la segunda, según los estudios de validación que se realizan en Sagua la Grande y también en el País Vasco.
La influencia de otros fenómenos climáticos, como las bajas presiones origina lo contrario: la hipoxia; y cuando esto sucede se han detectado un incremento de pacientes aquejados de cefalea, hipertensión arterial y padecimientos cerebro-vasculares. Este pronóstico resulta certero en más de un 80 por ciento, de acuerdo con comprobaciones realizadas en Sagua la Grande.
El doctor Lecha Estela es uno de los más prestigiosos estudiosos de la biometeorología en el continente, una rama de la meteorología destinada a investigar los efectos del tiempo sobre los organismos vivos, incluido el hombre. Desde principios de la década de los 80 del siglo pasado este estudioso se vinculó a la biometeorología a la que ha dedicado casi 30 años.
El doctor Aldo Moya Álvarez, jefe del Departamento de Pronósticos del Centro Meteorológico de Villa Clara, conocedor del interés de Luis Lecha por desarrollar un programa como el mencionado, le propuso participar, y junto a Alejandro Estrada Moreno, licenciado en Ciencias de la Computación, crearon el sistema.
Este programa tiene alcance global y es visitado por personas de numerosos países a través del sitio web www.pronbiomet.villaclara.cu, en el que ofrecen los pronósticos biometeorológicos dirigidos a la prevención y mitigación de los efectos potenciales del tiempo sobre un conjunto de enfermedades crónicas no transmisibles.
Uno entre tantosEse resultó uno de los numerosos trabajos que prestigian al CITMA en Villa Clara, merecedor de la sede del acto nacional por el Día Mundial del Medio Ambiente que se celebra desde 1972 por acuerdo de la Asamblea General de Naciones Unidas.
Otro aporte muy importante fue la reconversión de equipos de refrigeración y clima industrial que contenían refrigerantes agotadores de la capa de ozono en los establecimientos de la Empresa Cárnica.
La Oficina Técnica de Ozono, perteneciente al CITMA, ejecuta este proyecto de Eliminación de los Clorofluorocarbonos (CFC) en instalaciones comerciales y facilita el refrigerante sustituto, el aceite para este y otros accesorios.
La reconversión realizada en industrias villaclareñas demostró la factibilidad del Proyecto con el cambio de 625,8 kg de Freón 12 por el refrigerante alternativo 134 A que no afecta la capa de ozono, afirmó el ingeniero Alexander Santos Rodríguez, especialista para la ciencia, la tecnología y el medio ambiente.
Hasta ahora realizaron 11 de estos trabajos en los sistemas de frío de las cámaras de mantenimiento de los establecimientos de la Empresa Cárnica y una al sistema de refrigeración del cine de Camajuaní.
A pesar de los buenos resultados comprobados con la reconversión, aún hay empresas en la provincia renuentes a aplicar este proyecto debido a que dudan de su eficacia.
De persistir en su negativa, la única solución para estas entidades sería el cambio tecnológico, una opción más costosa para el país, pues a partir de 2010 está prevista la eliminación del uso de los Clorofluorocarbonos (CFC).
Justo con el medioLa reducción de 699 toneladas de contaminantes figura entre los logros del CITMA en Villa Clara con la participación de organismos, empresas e instituciones. Lo anterior se concretó con la rehabilitación de la laguna de residuales del asentamiento poblacional de Corralillo, el incremento de la eficiencia de la planta de biogás de la destilería Heriberto Duquesne y el mejoramiento de conductoras de residuales, entre otras acciones.
También se logró el incremento de las áreas boscosas con un aumento de 2 807 hectáreas en la superficie cubierta total, mientras el 75 por ciento de los suelos fueron beneficiados con medidas de conservación y mejoramiento.
Otros avances favorables lo constituyeron las acciones realizadas en 79 entidades para la reducción de las emisiones contaminantes a la atmósfera; el mejoramiento de las cuencas hidrográficas y de las estrategias dirigidas al cuidado de la diversidad biológica.
Se añade el destacado trabajo en el manejo de adaptación de especies de la flora y la fauna en el Jardín Botánico de la Universidad Central de Las Villas y en la educación ambiental.