CIENFUEGOS.— Danaisy Santana González fue presidenta de la Federación Estudiantil Universitaria en el municipio de Cienfuegos hasta 2007.
En respuesta a la indicación de Raúl de que los cuadros de la organización se vinculasen directamente a una responsabilidad laboral por el período de un lustro, esta joven graduada de la Licenciatura en Historia por el Instituto Superior Pedagógico Conrado Benítez, comenzó a ejercer la docencia en la Escuela Provincial de Instructores de Arte Octavio García.
En la actualidad es jefa de Departamento allí, y con solo 26 años resultó elegida Diputada a la Asamblea Nacional, durante la última legislatura. Además, se desempeña como delegada de la Circunscripción 39, perteneciente al consejo popular La Barrera, de Tulipán.
Con el propósito de reconocer sus méritos, el Consejo de Estado de la República de Cuba, a propuesta de la UJC, le confirió hace pocos días la Medalla Abel Santamaría.
Una vez vencida la reticencia inicial, refiere que «han sido noticias de alto impacto, dadas en breve tiempo. Tanto la medalla como mi condición de parlamentaria y de delegada representan grandes compromisos.
«Creo, sin aferrarme al lugar común, que muchos otros jóvenes cubanos pueden estar ahora mismo en mi posición». Es de la opinión de que los paradigmas no son inalcanzables, sino que se expresan y ejemplifican en la obra diaria de las personas que hacen lo necesario en su puesto.
Recuerda que tener que enfrentarme al primer proceso de rendición de cuentas fue muy difícil, debido a toda la tensión que conllevó la preparación: «Se trata de un acto abierto donde cualquier persona te puede preguntar sobre asuntos de diversa índole. Ya me siento más desenvuelta, tengo focalizado el cuadro social, identificamos las principales dificultades del área...».
Como diputada a la Asamblea Nacional integra la Comisión de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología. «Hemos investigado, entre otros temas, sobre el impacto del Programa de Profesores Generales Integrales en la enseñanza Secundaria», explica.
Dice que esa responsabilidad le absorbe tiempo a su función como docente: «Pero debo llevar todo a la vez, y me siento en capacidad de hacerlo».
Asegura que siempre sintió pasión por la Historia. Consciente de su connotación para las nuevas generaciones y el futuro del país, sostiene que resulta primordial en muchos aspectos, pero sobre todo en su contribución a perpetuar la cultura de los valores que engrandecieron la memoria de nuestra nación.
Orgullosa con la entrega de la Abel Santamaría, cuenta que en los días previos a recibirla pensaba lo mismo que cuando estaba propuesta para Diputada: «Que siendo tan joven no poseería las condiciones para tan alto honor».
Sin embargo, otros lo creyeron, y hoy Danaisy es una de las jóvenes que honran a la provincia con su hermosa trayectoria, crecida a diario mediante su obra cotidiana.