Las bandas de alimentación que acompañan al huracán Ike con abundantes lluvias y fuertes rachas de vientos todavía amenazan al occidente y centro del país, con probabilidades de inundaciones y desprendimientos de tierra, sobre todo en zonas montañosas y en lugares donde hay ya acumulados importantes de precipitaciones.
En las últimas veinticuatro horas se han registrado acumulados de lluvias en estas regiones entre 100 y 200 mm y superiores. Vale destacar que en algunas localidades pinareñas en solo 6 horas se han acumulado grandes volúmenes de agua. También se han reportado vientos con fuerza de tormenta tropical en el extremo más occidental de Pinar del Río y en la Isla de la Juventud.
Según un avión de reconocimiento, Ike aun es un huracán categoría uno de la escala Saffir-Simpson de un máximo de cinco, pero continúa intensificándose sobre las aguas del Golfo de México. Al mediodía de hoy presentaba vientos máximos sostenidos de 150 kilómetros por hora, con rachas superiores y su presión mínima central había descendido a 957 hectoPascal, mientras que su velocidad de traslación era de unos 13 kilómetros por hora, rumbo al Oestenoroeste.
Por el tamaño de este fenómeno climatológico y su posible intensificación se recomienda estar atentos a las próximas informaciones del Centro de Pronósticos del Instituto de Meteorología y a las orientaciones de la Defensa Civil.
En su reporte televisivo el doctor José Rubiera alertó además sobre el peligro de las zonas inundadas para las personas y pidió que se mantengan en lugares seguros.
Provincias cubanas en fase recuperativaEl Estado Mayor de la Defensa Civil decidió hoy pasar a la fase recuperativa las provincias cubanas que se encontraban en estado de alarma ciclónica, tras el alejamiento del huracán Ike del territorio de la Isla.
El aviso incluye a Ciego de Ávila, Sancti Spíritus, Cienfuegos, Villa Clara, Matanzas, La Habana y Ciudad de La Habana, así como el municipio especial de Isla de la Juventud y todos los municipios de la provincia Granma.
Añadió la Defensa Civil que los órganos de dirección a esos niveles deberán seguir adoptando medidas para garantizar el regreso seguro y ordenado a sus hogares de las personas protegidas y el restablecimiento de las condiciones normales.
Igualmente, mantener permanente vigilancia sobre la situación hidrológica de los territorios debido a que aún son afectados por lluvias.
En todas las provincias laboran ya miles de personas en la limpieza de calles y carreteras obstruidas por árboles derribados por el huracán, el inicio de reparaciones en las viviendas dañadas y la atención a las familias albergadas.
Especial empeño se registra en los trabajos que están permitiendo el reinicio gradual de los servicios de electricidad por brigadas de trabajadores del sector de todas las provincias y con el apoyo de los generadores de emergencia instalados por el programa de la revolución energética.
Igualmente, en garantizar el suministro de agua a la población, incluyendo la reparación de acueductos afectados por el fenómeno meteorológico.