La tecla del duende
RECUERDO casi todas las frases de Guillermo Cabrera Álvarez, nuestro Guille, el 1ro. de julio de 2007. Aquel día, una ocurrente tunera llegó hasta Guaracabulla para el encuentro teclero que se convocó desde esta columna. Y ante la interrogante de cómo crear una tertulia en Las Tunas, el Guille señaló: —Muy fácil. Citas para la biblioteca provincial y verás cómo las personas asisten a tu convocatoria.
No estaba ofreciendo Guillermo una fórmula o la receta que servía a todas las provincias; a todas las ciudades. Quería privilegiar la idea de una institución cultural que acogiera las tertulias, que varía por territorio, pero nace del entusiasmo con el que cada quien enamore desde su idea. El hecho es que, 15 años más tarde, el espacio de los ocurrentes tuneros festeja un aniversario cerrado, con el recuerdo feliz de haber recorrido los ocho municipios de la provincia.
Cómo olvidar los campismos de Río Jobabo, Cerro de Caisimú o Los Pinos. Las incursiones por Amancio, Majibacoa y Manatí; las tertulias de Colombia y la escuela pedagógica Rita Longa, los hermanamientos y las expediciones. Y los proyectos futuros en San Manuel, Puerto Padre, Jesús Menéndez y el IPVCE.
No abandonemos la idea de lograr que cada localidad donde nos lean esté conectada con nuestros lectores de todo el país. En Las Tunas y en Cuba. Es otro anhelo guillermiano, aunque no resulte muy fácil.
Felicidades entonces a quienes nos leen desde el Balcón del Oriente cubano; ya festejaremos juntos este aniversario.
Desde Guanabacoa, Elisandra Castillo Castañeda quiere sumarse a las tertulias capitalinas, aunque no descarta la idea de que la villa de Pepe Antonio tenga su propio espacio de encuentro. ¿Qué dirá de esto Nevalis Quintana? ¿Se sumarán Aymeé Martí, Zoila y Rodrigo? Ya lancé la botella al mar, y tiene destinatarios.
Manolo: Revisa bien la pequeña libreta, donde están mis frases. Ya lo dije todo y ¿no lo sabes? Mamita.
Hay que unirse, no para estar juntos, sino para hacer algo juntos. Juan Donoso Cortés.