Los que soñamos por la oreja
Skizoo es una de las bandas más llamativas en el actual panorama español de rock y metal. Foto: Cortesía del autor Por diversas razones no son muchas las bandas internacionales de rock que visitan suelo cubano. Al margen de que en nuestro país la información sobre dicho género circula profusamente entre los interesados, al punto de que resulta asombrosa la velocidad con la que nuestra gente accede, por vías no oficiales, a producciones discográficas salidas al mercado mundial con apenas días de haber sido presentadas, presenciar la actuación en directo de un grupo tiene una magia especial y sigue siendo el verdadero modo para conocer las reales potencialidades de determinada formación, pues como se sabe en un estudio de grabación nos pueden pasar gato por liebre.
Gracias a coordinaciones previas entre el Instituto Cubano de la Música y la Agencia Cubana de Rock, esta semana tendremos la posibilidad de saciar algo nuestras ganas de disfrutar propuestas de bandas foráneas y así, los amantes del rock en Ciudad de La Habana y Pinar del Río podremos asistir a los conciertos del grupo español nombrado Skizoo. Según la información que he recibido sobre el ensamble, ellos son clasificados dentro de lo que en España denominan metal alternativo, es decir, una mezcla entre heavy metal y rock alternativo. Vale la pena comentar que la escena alternativa española de los últimos años abarca una variedad de estilos en la que se incluyen desde el post rock, de nombres como Migala, hasta manifestaciones de un pop rock tradicional, como el cultivado por Sidonie o Deluxe, sin olvidar que en dicho ambiente se mueven también exponentes del llamado rock de autor, al corte de Nacho Vegas o Christina Rosenvinge.
Skizoo viene a ser continuación de una antigua formación española, llamada Sôber, de la que yo conocí un notable disco, el álbum Synthesis, publicado en 2001. Para que se tenga una idea de la importancia que llegó a registrar la banda en su país natal, ellos compartían cartel con nombres como Deftones, Dover, HIM y Hamlet, agrupaciones de primerísimo nivel en la escena internacional. Por esas cosas que suelen ocurrir en el mundillo musical, cuando estaban en muy buen momento, Sôber se fracciona en dos partes y así nacen Savia y Skizoo, que es el grupo que ahora nos visita.
Integrado en la actualidad por Jorge Escobedo y Antonio Bernardini a las guitarras, el bajista José Hurtado Fuentes, Iván Ramírez Bella a la batería y Alejandro Martínez «Morti» como vocalista y figura frontal, la banda tiene editado varios discos desde que debutaron en 2005. El primero de dichos fonogramas fue el álbum denominado justamente Skizoo, que sale al mercado a través de la compañía El Diablo. Ante el éxito de piezas como Renuncia al Sol, Arriésgate, Habrá que olvidar o No todo está perdido, al siguiente año la banda es firmada por EMI, que les reedita el primer álbum, pero con el agregado de la participación del vocalista Enrique Bunbury como invitado especial. Los vínculos con esta figura, de gran popularidad por su labor como cantante de Héroes del Silencio, se traslucen también en algunos elementos comunes apreciables en los textos de las melodías de Skizoo en relación con las de Bunbury.
Llegado el 2007, la agrupación pone a disposición de sus seguidores un nuevo trabajo fonográfico, Incerteza, que marcaría la ruptura con EMI. Ni cortos ni perezosos, en 2008 firman contrato con una compañía independiente, DFX Records, con la que durante el primer semestre del año presentan el digi-pack titulado 3, contentivo de un CD y de un DVD con un mini concierto del grupo, así como entrevistas y comentarios. Y como para dar señales de que con la banda no va eso de la crisis discográfica, a fines del propio 2008 publican el álbum La cara oculta, también editado por DFX Records.
La crítica en España cataloga a Skizoo como uno de los proyectos más llamativos en el actual panorama español de rock y metal. Con una carrera corta pero muy intensa, ellos han sido incluidos en múltiples listas de lo mejor del año en aquel país europeo, tanto en las categorías de grupo, discos, directo, canciones, como individualmente a manera de instrumentistas. Ahora, en los conciertos que la banda ofrecerá en Cuba, podremos comprobar si la aureola que traen se corresponde con lo que hacen sobre el escenario.