Frente al espejo
La noticia de que el próximo mes de noviembre estarán elaborados el compendio y las normas que implementen en Cuba la política de bienestar animal, ha despertado no pocas opiniones y comentarios de los lectores, sobre todo, a raíz de la publicación del trabajo Que todo sea por la vida (Marianela Martín González, 6 de septiembre). Y, ha de serlo, pues sería la primera vez que el país tendría una regulación integral que contempla derechos y deberes de los ciudadanos hacia los animales, así como medidas punitivas para quienes no los cuiden y protejan.
En tal sentido, el cibernauta Cristóbal Arredondo reconocía el enfoque cultural y educativo que tendría la norma, pues desde la educación parte todo. «Si no somos capaces de educar a nuestra sociedad desde las edades más tempranas en una conciencia de amor y respeto hacia los animales, entonces no es posible lograr una conducta en las personas donde se reconozca y respete el bienestar animal, sobre todo en los más jóvenes».
Añadía que como toda norma legal, el futuro Decreto-Ley tendrá su Reglamento para asegurar su implementación y cumplimiento, y también habrá contravenciones para aquellas personas que violen lo legislado. «Pero creo que lo más importante es que cada ciudadano asuma una actitud responsable, de amor y respeto hacia los animales, y esa tarea nos toca a todos».
Excelente artículo con una visión precisa y humanista del trabajo que se está realizando por el equipo redactor, señaló Mayra Cruz, al referirse al grupo de trabajo a cargo de la confección de la política y su Decreto Ley, el cual está integrado por más de 40 personas de diferentes sectores y disciplinas, guiados por el Ministerio de la Agricultura como organismo de la Administración Central del Estado.
«La mayor importancia radica en la emisión de esta importante norma jurídica que desarrolla la Constitución de la República, además con una norma de rango superior como lo es un Decreto-Ley que también se ratifica por la Asamblea Nacional del Poder Popular y que tendrá un proceso más dinámico de aprobación como lo requiere este sensible tema.
«Con importante referencia como señala el artículo a las sanciones administrativas e incluso penales que se prevén contra los infractores de lo dispuesto», apuntó. Sobre este mismo asunto, Ismel Romero Zambrano aludía: «Espero que no sean tan pasivos en las medidas a adoptar para aquellas personas que incumplan estas leyes. Los animales son seres vivos y sienten».
Otros cibernautas como Anaeli se refirieron a la necesidad de contar con clínicas veterinarias y con los recursos que llevan, pues es una atención imprescindible. Y también que se permita el ejercicio a privados, con la correspondiente certificación y puedan importar medicamentos e insumos de uso veterinario.
Y es como decía Leticia Marce Martel: «todos conformamos parte del reino animal y le debemos respeto al planeta. Respetando al planeta está implícito el amor a la naturaleza, a lo vivo, a nosotros mismos. Eso es crecer».