Frente al espejo
«Reconforta leer el artículo de Lourdes M. Benítez Cereijo publicado en el JR del domingo 10 de marzo, a quien le transmito felicitaciones (¿La solución es ignorar?, Látigo y cascabel). Es cierto que en la situación descrita por ella no puede funcionar el refrán de “A palabras necias, oídos sordos”. Sería lamentable actuar así en nuestra sociedad, donde la educación y la cultura son paradigmas de la Revolución.
«El comentario critica el inadecuado uso del uniforme por una escolar y su desenfado ante la denigrante letra de un reguetón (la jovencita parecía halagada con un ¿texto? que la comparaba con un animal). Reafirmo el criterio de la periodista de que la indiferencia no es el remedio para curar la pérdida de valores y la medianía espiritual que se percibe con frecuencia entre ciertos estudiantes. No creo que este artículo se considere reiterativo: cuanto se haga por rescatar valores siempre será poco, y es innegable que se debe comenzar por el seno de la familia, yendo después la escuela y los medios masivos de comunicación.
«Soy médico especialista, tengo la edad de la Revolución y me resisto a pensar que estemos viviendo una suerte de regresión ante lo mal hecho. Continuaré teniendo fe en el mejoramiento humano». (Dr. Roberto Fernández Viera)