Frente al espejo
«Me impactó su escrito del jueves 12 de agosto de 2010, titulado Volver a casa (Osviel Castro Medel). No hay mejor regalo para esos jóvenes deportistas que el reconocimiento de su pueblo, sencillo, sin fanfarrias ni oropeles. Un acto de recibimiento en la cuadra, en los centros donde entrenan y/o estudian, en los centros de trabajo de sus padres, etc.
«La única economía no necesaria es la del corazón. Hay que ver cómo se entregan estos jóvenes, cómo luchan y se enfrentan a un contrario en los terrenos y al enemigo fuera de estos.
«A veces he escuchado a los improvisados managers de graderíos comentar cómo fulano bateó para doble play o mengano estrelló el saque contra la net, y les he preguntado su profesión. Estoy seguro de que cualquiera de nuestros eminentes profesores, médicos o licenciados se verían involucrados en otras situaciones si tuvieran que impartir una clase u operar sabiendo que su clase o su operación está siendo observada por millones en el mundo entero, y le confiere más compromiso a su actuación que 11 millones de cubanos están pendientes de lo que hagan. No saben que cuando uno de estos muchachos batea para doble play o saca mal quisiera que la tierra se lo tragara.
«Los he visto llorar de vergüenza y frustración al obtener una medalla de plata mundial o panamericana, medalla que constituye toda una fiesta en otras latitudes. Lo que pasa es que para nosotros, un pueblo de oro, solo merece el oro.
«Les he escuchado decir que se mueren de pena al regresar a la tierra querida y no poder explicar que no se obtuviera la medalla del mejor color. Encerrarse en sus casas durante días, por la pena. Le puede parecer increíble, pero es cierto, periodista.
«Creo, además, que esos muchachos merecen un monumento por las condiciones tan adversas en que compiten, pues a nadie se les asedia de la manera en que con ellos lo hacen; y otra cosa es ver que contrarios de inferior calidad tratan de enamorarte con sus formas de vida consumistas para que no los derrotes en la arena deportiva.
«El tema tiene muchas aristas pero solo deseo expresarle mi reconocimiento por su artículo y, lo más importante, que se ramifiquen estos estímulos a través de las organizaciones políticas y de masas, en las comunidades, centros de estudio, sobre todo en los juegos multidisciplinarios; y que lleguen a todos y cada uno de los jóvenes integrantes de esas delegaciones. Ese mar, o ese río, o ese arroyo de pueblo será siempre el mayor estímulo al esfuerzo y a la consecución de la victoria». (Francisco García)
«Muy interesantes todas las historias, pero la que de verdad más me ha impactado ha sido la del amor entre los dos abuelos. Felicidades para el matrimonio de Margarita y Tuti; que cumplan 60 años más (Entre tantos amores, 14 de agosto, compiladora Mileyda Menéndez Dávila). Es un ejemplo que todo joven debe seguir; hay muchos encantos en una linda relación». (Bless)