Frente al espejo
«A diario leo la edición digital del periódico. Quisiera felicitar a todo el colectivo y agradecerles el trabajo que realizan para que nuestro pueblo se mantenga informado, en especial a los compañeros que atienden la página Sexo Sentido y las secciones Cartas son Cartas y Acuse de Recibo, las cuales juegan un papel importante en la sociedad». (Edelbis López, estudiante de Licenciatura en Química de la Universidad Central Marta Abreu)
«Muy emotivo el artículo La palabra interminable (Josefa Bracero, 1ro. de diciembre), dedicado al Día del Locutor. Hay ejemplos que deben mantenerse latentes para las nuevas generaciones y frases que se han quedado para la historia y que es bueno de vez en cuando recordar de la manera que usted lo ha hecho». (Walkyria Cao Fonticoba)
«Ante todo mi saludo revolucionario y felicitaciones a JR por sus logros. Sus periodistas son sagaces, críticos, reflejan los problemas con crudeza y hacen una labor política y educativa relevante. Felicitaciones, además, a José Alejandro Rodríguez y Luis Sexto por sus enseñanzas y valentía al plantear insuficiencias administrativas.
«Quiero exponerles mi inconformidad con relación al comentario titulado Contiene lenguaje de adultos (Richard Velázquez, 6 de diciembre).
«En él se hace una justa crítica a un grupo de aficionados que chiflaron a deportistas del equipo Industriales en la inauguración de la Serie Nacional de Béisbol. Pero al mencionar la frase “Santiago de Cuba: rebelde ayer, hospitalaria hoy y heroica siempre”, no fue adecuado que expresara que lo sucedido en el estadio deja muy mal parado el título de hospitalaria.
«Los títulos de Santiago no son un hecho pasado. Esta ciudad se los ganó... No son simples consignas, sino valores que llevamos muy dentro de nosotros los santiagueros y el pueblo de Cuba que así lo reconoce.
«Lo otro expuesto en el escrito acerca de si estas faltas de respeto comenzaron en el estadio Latinoamericano, etc., no son lo más importante. Lo esencial es que trabajen los periodistas, las autoridades deportivas, los integrantes de las peñas y de las organizaciones de masa y políticas para eliminar estas indisciplinas en los parques beisboleros y cualquier otra instalación, deportiva o no, en que hechos como estos suceden.
«Propongo que este asunto se debata en los espacios necesarios...». (Ernesto E. Poll Soto)
Y ahora que Poll ya completó su turno, voy al cajón de bateo. Sé que las menciones de estas indisciplinas duelen, pero hay que criticar para tocar nervios. El orden no lleva camiseta.
¿Está alguien fuera del alcance de la violencia? Obviamente no. Si queremos sano espectáculo y orden, entonces debemos comprender que todos somos responsables y censuraremos el problema antes de que asome su oreja peluda.
Que me perdonen Poll y otros buenos aficionados si hay que mencionar nombres y reiterar que el abucheo y la burla son antideportivos. Ninguna crítica, por otro lado, escamoteará el prestigio de una provincia; más bien lo fortalecerá y hará que miremos dónde cae el mulo para zurrarlo allí mismo.