Frente al espejo
Como recordarán los lectores, el sábado 31 de marzo (La indiferencia no es respuesta) expresamos nuestra insatisfacción con la desatención que las empresas Panataxi y Transtur habían brindado a una denuncia que publicamos en la edición del 25 de marzo, sobre el incorrecto proceder de unos conductores de taxis.
En la tarde de ese día llegó a nuestra redacción la respuesta de Transtur. Los dejo con una síntesis del mensaje.
«El objetivo de esta misiva es agradecerle su contribución a los esfuerzos que realiza la empresa Transtur para consolidar la disciplina y la calidad del servicio que brindamos.
«En relación con el artículo publicado el 25 de marzo en el periódico Juventud Rebelde con el título Una historia real (Rosa Miriam Elizalde), les detallamos los pasos que seguimos para ofrecerles una respuesta.
«Convocamos a una reunión a los choferes involucrados y a sus dirigentes administrativos. La celebramos el lunes 26 de marzo y en ella analizamos íntegramente el comentario firmado por Rosa Miriam. La Dirección de la Unidad Empresarial de Base (UEB) a la que pertenecen los vehículos, llevó a esa reunión los documentos que ampararon el trabajo del día 16 de marzo —fecha en que ocurrieron los acontecimientos narrados por la periodista— y se les demostró que no había nada que justificara el no haberle brindado el servicio.
«Del análisis realizado en esa reunión también quedó claro que el cuarto vehículo (HVU 878), un microbús, estaba parqueado en la piquera del Cohíba y su chofer se encontraba en el hotel contactando con sus clientes.
«Los tres restantes choferes no pudieron responder convincentemente sobre su actuar. En el encuentro se les comunicó la gravedad de la situación, pues habían negado un servicio y habían mentido, afectando así la imagen de los demás trabajadores. Desde ese día estos choferes no han manejado más, y comenzamos a identificar las medidas disciplinarias que debíamos tomar con ellos a tenor de la legislación laboral vigente, proceso que necesariamente tomará unos días más.
«A partir del 27 de marzo comenzamos a realizar en todas las UEB de nuestra empresa reuniones con los trabajadores para analizar el artículo. En ellas, los trabajadores han mostrado su rechazo e indignación ante esas actitudes. Por orientaciones de nuestro grupo empresarial, estos análisis se están realizando en las demás empresas del sistema Transtur.
«Como puede apreciar se han desarrollado un conjunto de acciones desde el mismo día que apareciera su artículo en el diario».
Hace unas horas recibimos la respuesta del grupo empresarial Panatrans, al que pertenece Panataxi. En ella también se precisa que los trabajos publicados el 25 y el 31 de marzo ayudan a la entidad, por cuanto ponen el dedo en la llaga de dificultades concretas que tienen sus servicios; y enfatiza en la responsabilidad de la entidad a la hora de responder de manera sistemática a señalamientos hechos en la prensa.
La comisión disciplinaria creada allí para analizar el caso estimó que el trabajador se negó a prestar un servicio en horario de trabajo y con su vehículo apto para hacerlo, lo cual se consideró una violación grave de la disciplina laboral.
Una vez que se valoraron todas las circunstancias relacionadas con el caso, se decidió imponer al conductor la sanción de cambio de labor, por un año, a otra plaza de menor remuneración o de condiciones laborales distintas a la que ocupaba.
JR agradece a ambas empresas la atención que brindaron a la denuncia. Más allá de los análisis puntuales, esperamos que lo ocurrido contribuya modestamente al debate entre los trabajadores de ambas entidades sobre la calidad y la razón de ser de nuestro trabajo.