Acuse de recibo
Orlando Hernández Ponce, quien reside en calle 20, No. 9, Niquero, en la provincia de Granma, clama porque, dadas las limitaciones de combustible y otras carencias severas que están incidiendo negativamente sobre la higiene y recogida de basura en pueblos y ciudades, urge buscar métodos más ágiles ante la exorbitante acumulación de desechos.
Considera que en cada territorio hay que ponerle todo el énfasis, sin justificaciones ya manidas, a este grave asunto que prolifera cada día más.
Sostiene que se requieren estrategias cumplibles, que nazcan del intercambio de las respectivas autoridades con los propietarios de carretones, buscar por consenso formas de pago, y movilizarlos por áreas de trabajo, consejos populares y circunscripciones.
Añado a lo planteado por Orlando que situación tan tensionante obliga a buscar soluciones tradicionales en la recogida de basura. Lo que sí es inaceptable es seguir conviviendo con ese deterioro higiénico y medioambiental que a la larga contamina la moral, el orden y el respeto de la ciudadanía. ¿Qué podremos entonces enseñarles a nuestros niños?
Muy preocupado escribe el jubilado Servando Eugenio Carvajal Moreno, quien reside en Patria 75, esquina a Sordo, en la localidad avileña de Morón; quien está suscripto a los periódicos Invasor y Juventud Rebelde.
Cuenta que allí los periódicos llegan con varios días de atraso desde hace ya varios meses. El 6 de mayo, día en que me escribió, llegaron los ejemplares de Juventud Rebelde de los días 19, 23, 24 25 y 26 de abril y los dominicales de ese diario del 21 y 28 de abril. Y también arribaron ese día los
ejemplares del avileño Invasor del 20 y el 27 de abril.
«Todos estos periódicos juntos en el día de hoy, y esto es algo normal en los últimos meses, manifiesta. Debo señalar que existe un tren que da viajes regulares entre Ciego de Ávila y Morón, localidades distantes unos 36 kilómetros. Me pregunto a qué se debe entonces este absurdo inmovilismo y tamaño mal servicio».
Esperamos que Correos de Cuba, responsable de la distribución de la prensa en Cuba, pueda ofrecerle una respuesta a Servando Eugenio sobre las causas de esa anómala y morosa situación.