Acuse de recibo
Un niño enfermo es como un tropiezo de la suerte, más hondo a veces que un pozo ciego. Todo cuanto se haga por aliviarlo debe parecer poco a la bondad humana. Por eso, solicitábamos desde estas líneas (18 de agosto) apoyo para la familia del pequeño espirituano José Luis González Pérez.
Su padre, José González Saavedra, nos escribía entonces desde la Finca Leonidez s/n, Mayajigua, municipio de Yaguajay, buscando una ayuda constructiva para garantizar cuanto antes las condiciones de estricta higiene que necesita el menor inmunodeprimido.
Resulta que ellos habían comenzado la edificación de su casa desde el 2004, por medios propios. Pero tras detectarse en 2007 el padecimiento de su hijo, se vieron en la necesidad de acelerarlo todo.
Los trabajadores sociales e instituciones y autoridades de la localidad habían realizado gestiones diversas para darle el impulso necesario a la familia, pero no se veían los avances.
El 7 de septiembre último supimos que las manos fraternas del capitalino Jorge Castellanos Milán no bien había acabado de conocerse el caso del niño en la edición de JR, comenzaron a multiplicar la información como un surtidor de humanismo.
Escribió cartas y llevó hasta disímiles organismos y entidades la pena sin nombre de aquellos padres y la necesidad de apoyarlos. La pareja espirituana se comunicó con este amigo que les había surgido en el infortunio para agradecer tamaño abrazo.
José Luis y su esposa también le contaron a Jorge que ya había comenzado la entrega de recursos para garantizar el ambiente indispensable a la salud de su hijo.
A propósito de la situación, que tanto afecto desató, hoy publicamos una tercera misiva al respecto. Esta viene remitida por Isley M. Pérez León, directora de Vivienda en la provincia de Sancti Spíritus y otras autoridades de esa entidad.
Afirma Isley que realmente es cierta la relatoría de gestiones que el promovente (José González Saavedra) ha llevado a cabo; y que el caso ha sido atendido en varias ocasiones por el municipio donde reside.
«Conocemos por los especialistas del municipio de Yaguajay —donde se pudo comprobar que la vivienda del remitente se encuentra en el plan de inicio y desarrollo aprobado por el Consejo de la Administración para el año 2010— que por la situación de enfermedad que tiene su hijo, la empresa destinada para el acarreo de los recursos es el Complejo Agroindustrial Aracelio Iglesias».
Agrega también la Directora que en un inicio se determinó para esta familia la tipología constructiva I —no se precisa en la carta qué significa—, pero por las características y solicitudes del propietario de agilizar la ejecución de la obra, se llegó al acuerdo de edificarla como tipología III, con techo de zinc.
«Actualmente se le entregaron todos los recursos, como el cemento, bloques, áridos y el techo para la terminación de la misma, quedando el compromiso de culminarla entre los meses de octubre y noviembre de este año».
Igualmente refiere la funcionaria espirituana que se comunicaron con el papá y este estuvo conforme con la respuesta ofrecida a su reclamo.
Agradecemos a Isley la misiva y los trámites acometidos. A cuantos se han preocupado, valga el empuje hacia tan sensible meta.
En aras del rigor indispensable, Acuse no recibe quejas de ningún tipo vía telefónica. Se ha dicho en muchas ocasiones, pero no todos entienden la necesidad de autentificar cada caso con un documento, un nombre completo y una dirección particular. Con palabras textuales de quien o quienes reclaman, que pueden enviarse de forma postal, por correo electrónico o entregarse personalmente en la redacción del periódico.
Para cualquier otra gestión o duda, para saber si llegó su misiva o cómo va la atención del caso, está disponible en el machón de JR el número de nuestro Departamento de Atención a Lectores. Entendámonos. Gracias.