Las puertas imaginarias de la Universidad de La Habana se abren cada año para miles de jóvenes que llegan de todas partes del país, cargados de sueños y ganas de sumergirse en ese mundo de conocimientos y viviencias inolvidables
Hay quienes opinan que en la adolescencia se es inmaduro para integrar la Unión de Jóvenes Comunistas, pero los pioneros sostienen que al terminar la Secundaria están preparados para tomar esa y otras decisiones cruciales