Ni las colosales dimensiones del estadio Maracaná ni la atronadora torcida brasileña consiguieron imponerse al once uruguayo que en 1950 venció a la verdeamarelha en la final de un mundial de fútbol que hizo historia. En exclusiva para Juventud Rebelde, Daniel Chavarría viste la casaca de delantero y conduce hasta nuestra área chica sentimental su visión de lo que fue aquella herejía o bravata charrúa
El cuento que presentamos pertenece al libro Desde la soledad y la esperanza, publicado en el 2007 por la Editorial Capitán San Luis