Para el martes, está agendado el encuentro de Jair Bolsonaro con su homólogo estadounidense, Donald Trump Autor: El Universal Publicado: 17/10/2018 | 01:14 pm
BRASILIA, octubre 28.— Un inusualmente comedido Jair Bolsonaro se dirigió a sus seguidores para saludarles en la victoria, cuando los números del Consejo Electoral le otorgaban una mayoría irrebatible que poco después, contabilizado el 98,96 por ciento de los votos, le daba el 55,29 de ellos y al petista Fernando Haddad, 44,71 por ciento.
El ultraderechista, quien se caracteriza por un lenguaje tan agresivo y grosero como su pensamiento, agradeció a sus seguidores y dijo que su mayor deseo ahora era «seguir las enseñanzas de Dios al lado de la Constitución brasileña»: una postura impostada que adoptó los días recientes, luego de comprobar que sus bravuconadas le hacían perder puntos en las encuestas.
En su brevísima alocución, Bolsonaro también manifestó que buscaría asesoría técnica sin lineamientos políticos, y que cumpliría sus compromisos.
Al contrario de estas palabras, el representante del Partido Social Liberal ha anunciado que los opositores de su Gobierno tendrían que irse si ganaba, y una reducción del Estado y de los ministerios que da cuenta del fuerte color neoliberal que tendrá su Gobierno.
A esas grandes mayorías que padecerán su mandato se dirigió Haddad algunos minutos después, quien anunció que asumirá su responsabilidad de hacer una oposición que ponga los intereses de todo el pueblo por encima de todo, en nombre de la democracia.
El candidato del Partido de los Trabajadores y de todos los sectores democráticos que se le unieron de cara al balotaje, también dijo que llevaría ese mensaje con determinación y valentía a todos los rincones del país, lo que fue entendido por analistas como la confirmación de que se abre para los sectores de izquierda y antifascistas de Brasil, una etapa de resistencia que Haddad ha asumido.
El dirigente petista recordó que los derechos civiles, políticos y laborales de los brasileños están en juego, conocedor del verdadero cariz que trae el mandato de Bolsonaro: un exmilitar que ha declarado su nostalgia por la dictadura y que habla con desprecio de las mujeres, los pobres y los negros.
«Un profesor no huirá de la lucha ni le teme. No dejaremos que este país vuelva hacia atrás», prometió Haddad.
Una campaña sucia contra el PT que se inició con el golpe contra Dilma, continuó con el encarcelamiento de Lula y su inhabilitación como candidato, y siguió los últimos días con una retahíla de fake news contra Haddad, alimentó el camino del ultraderechista hacia la presidencia, en medio de la crisis de institucionalidad provocada precisamente por la derecha que usurpó el poder.
Ahora Bolsonaro presidirá el país con un Congreso donde el PT se mantuvo como primera mayoría en la Cámara de Diputados, aunque el PSL del ultraderechista logró ubicarse allí como la segunda fuerza, igual que en el Senado. Por tanto, se presume que imponer sus leyes no será tan difícil al ganador, aunque tampoco resultará un paseo.
Durante la jornada, que transcurrió de manera tranquila aunque hubo un asesinato de un joven petista, también se eligieron los gobernadores de 12 Estados donde fue necesaria segunda vuelta.
Las reacciones de pesar por el golpe a la democracia que significa el triunfo de un hombre como Bolsonaro en Brasil se hicieron sentir enseguida desde distintos lugares del mundo. En Twitter, un usuario publicó: La democracia está de luto.