Los ciudadanos agradecen el servicio del centro mayabequense. Autor: Cristian Domínguez Publicado: 21/09/2017 | 06:15 pm
Güines, Mayabeque.— Creada hace poco más de cuatro años, la provincia de Mayabeque advierte transformaciones en el modelo de estructura y funcionamiento de dirección, en función de una mayor racionalidad y eficiencia en la gestión del Gobierno.
Como parte de estos cambios se separaron las funciones y estructuras entre las asambleas del Poder Popular y sus consejos de la Administración, lo que posibilita un mejor uso de los recursos humanos, materiales y financieros. La Oficina de Servicios y Trámite en Güines, subordinada al Consejo de la Administración Municipal y atendida por un especialista de la Comisión de Implementación de los Lineamientos de la Política Económica y Social de la Revolución, es uno de los mejores ejemplos de todo ello.
Foto: Cristian Domínguez.
Desde noviembre de 2013 la entidad presta servicios a los 11 municipios de la provincia de Mayabeque, entre ellos los referidos a la justicia (Registro Civil, Notaría y Propiedad), control y cobro de multas, planificación física y vivienda, venta de sellos, una representación de la ONAT para atender a los cuentapropistas en la sección de trámite y empleo, y el Registro de consumidores (Oficoda).
Hasta la actualidad más de 60 000 personas han recibido sus prestaciones, se han recepcionado alrededor de 50 000 trámites, y en mayo las recaudaciones evidenciaron ingresos próximos a los tres millones de pesos.
Aún en búsqueda de sincronización y perfeccionamiento, el centro pretende acercar los trámites a la población mientras se integran y simplifican los servicios, ubicados todos en el mismo lugar.
«Si el cliente llega a nosotros por una gestión de Notaría y, además, requiere del Registro Civil, en este centro tiene los dos a su alcance. Así ahorra tiempo y dinero», manifiesta Bárbaro Humberto Guerra Bustillo, jefe de la unidad.
Para el güinero Félix Hernández Pineda, «la población ha asumido positivamente el cambio, ya que tiene a su alcance varias gestiones, se evita el burocratismo y en un mismo lugar puede resolverlo todo».
Una sección vital es la de Trámites, creada recientemente, con las funciones de recepción y captación, esta última en contacto con los diferentes departamentos y si bien en algunos sectores se han agilizado los procesos en busca de inmediatez en la respuesta a la población, no todos los trámites se realizan con la misma celeridad.
«Todavía algunos se retrasan y en ello influyen factores subjetivos del cliente y de nuestros trabajadores. A veces las personas son reticentes al cambio. En otro momento, las áreas o sectores que ahora están todas en una misma unidad estuvieron dispersos y, por tanto, actuaban de otra manera, explica Guerra Bustillo.
Comenta que los que más demoran son los litigios que vienen desarrollándose durante años. «Nosotros tratamos de cumplir los ciclos, pero en estos casos existen documentos que han tenido transformaciones u otras dificultades que retardan la búsqueda y hacen más moroso el proceso».
«Por ejemplo, el trámite de Registro Civil, en los momentos iniciales de nuestro centro, estuvo sobre los 20 y 30 días por cuestiones de sincronización en el sistema computarizado y aspectos organizativos de la propia institución, pero en estos momentos lo garantizamos en cinco días».
En cuanto a la vivienda, precisa el directivo de la unidad mayabequense, el plazo establecido es de 30 días, aunque en ocasiones no se cumple debido a la necesidad de realizar investigaciones, pues no se tienen todos los documentos de las personas naturales, entre otros motivos. Esta área y la de Planificación Física son las que presentan mayores dilaciones.
«El Registro de la Propiedad tiene un ciclo de diez días, el cual nunca se ha violado, y el de consumidores es inmediato. Mientras, el trabajo por cuenta propia y la licencia operativa de transporte funcionan adecuadamente en un plazo de 24 horas», manifiesta Guerra Bustillo.
Una atención esmerada distingue a la entidad. Desde hace ya un buen tiempo Marta Pineda Quintero, residente en Güines, está enfrascada en la parte legal de una permuta. Lleva meses en el intento de poner toda la documentación en orden. Comenta que en este centro le ha sido posible agilizar el «papeleo» y destaca el buen trato que ha recibido del personal que presta servicios aquí.
La entidad —conformada por 63 trabajadores, entre ellos 48 técnicos y el resto administrativos y ejecutivos— goza de más del 80 por ciento de aceptación de la población en el territorio, según encuestas que ha realizado, y prevé incorporar con posterioridad otros servicios como el Registro Pecuario.
Y es que el respeto al ciudadano va mucho más allá de mostrar cortesía, tacto y gentileza con él. Claro que un saludo afectuoso y una orientación oportuna son la premisa de una buena atención. Pero no basta con ello, hay que pensar la prestación del servicio como un todo integrado, en el que se encadenan recursos y gestiones que, al sumarlos, componen la calidad de lo que se brinda. Por ese rumbo se conduce esta unidad mayabequense, comprometida a seguir mejorando su labor, que es, en fin de cuentas, una labor para el pueblo.