Representantes del Consejo de Iglesias de Cuba, el Movimiento Estudiantil Cristiano y miembros del Buró Nacional de la UJC, dialogaron con Elizabeth Palmeiro, esposa de Ramón Labañino. Autor: Roberto Suárez Publicado: 21/09/2017 | 05:30 pm
«Los sectores juveniles religiosos han realizado por años una valiosa campaña de información en varias regiones del mundo para sensibilizar a más personas con la causa de los Cinco, no para que se haga justicia —porque al cabo de 15 años ya no podría llamarse justicia— pero sí para que finalmente sean puestos en libertad».
El agradecimiento lo transmitió Elizabeth Palmeiro, esposa de Ramón Labañino, durante un encuentro con representantes del Consejo de Iglesias de Cuba y miembros del Movimiento Estudiantil Cristiano de varias provincias del país, organizado por el Buró Nacional de la UJC, en la capitalina Fragua Martiana.
«Agradecemos, sobre todo, el esfuerzo que han realizado en el exterior para lograr que a Olga y Adriana se les retire la negativa de visa y puedan algún día visitar a sus esposos», expresó Elizabeth, quien aprovechó para dialogar con los presentes sobre el estado actual del caso de los Cinco.
«Esta es una batalla del pueblo de Cuba, pero sobre todo de las nuevas generaciones. Es alentador ver cómo en otros lugares del mundo nos encontramos con jóvenes que fueron informados y se identificaron con la causa gracias a un intercambio fraterno con la juventud cubana», acotó.
A veces pensamos que todo lo relacionado con los Cinco toca únicamente una dimensión política, pero tenemos que pensar que va mucho más allá, a la dimensión familiar, afectiva, humana, afirmó Antonio Santana, vicepresidente primero del Consejo de Iglesias de Cuba.
Este grupo de jóvenes —señaló al hablar en nombre suyo y de todos los presentes— se siente heredero de acciones que han hecho los líderes del Consejo de Iglesias de Cuba por aproximadamente 12 años. «Continuamos con esa tarea porque toca la sensibilidad nuestra, no solamente como cristianos, sino también como cubanos responsabilizados con el prójimo», añadió el líder religioso.
Dianet Martínez Valdés, presidenta del Movimiento Estudiantil Cristiano de Cuba, destacó que esa organización ha estado trabajando fuertemente en sus espacios formativos por la liberación de los Cinco. «Es una lucha y un reclamo que ha asumido el movimiento, no solo en Cuba, sino en la región de América Latina y en los propios Estados Unidos», refirió.
«Siempre va a haber un lugar donde sembrar algo nuevo», dijo por su parte Michael Beatón, coordinador del Programa Juventud del Consejo de Iglesias de Cuba.
«Lo importante es que continuemos trazando estrategias de conjunto con la UJC, determinar en qué espacios podemos apoyar más, cómo lo podemos hacer, y que no se deje a un lado la participación de las Iglesias que, en definitiva, están dispuestas a apoyar cualquier acción que tome nuestro Consejo y el Gobierno en general para lograr el regreso de nuestros cinco hermanos», comentó.
Con Michael coincidió Osnay Miguel Colina, miembro del Buró Nacional de la UJC, quien afirmó que se debe insistir en la lucha desde cada uno de los escenarios y los roles de cada persona.
«El Consejo de Iglesias de Cuba y el Buró Nacional de la Juventud Comunista están en el deber de compartir y de asistir a que ese intercambio no solo sea fluido, sino sistemático», ahondó.
En tal sentido, Leira Sánchez Valdivia, también miembro del Buró Nacional de la UJC, insistió en que hay que seguir construyendo estrategias comunes para sumar a niños y jóvenes al reclamo por los Cinco.
«Siguen naciendo niños, se siguen desarrollando jóvenes, y sigue habiendo mucha gente desinformada sobre el caso. Tenemos que seguir concentrando nuestras energías en las nuevas generaciones, para que conozcan y sientan la causa; porque en la medida en que lo hagan, serán más capaces de transmitir una opinión, un juicio, una verdad», sentenció.
Durante el encuentro, y como muestra de solidaridad, el Vicepresidente primero del Consejo de Iglesias de Cuba entregó a Elizabeth Palmeiro una Biblia como regalo.
Al finalizar, los presentes pudieron disfrutar de la exposición El verdadero hombre, compuesta por pinturas de Antonio Guerrero, en homenaje al aniversario 160 del natalicio de José Martí.