La banda sueca de música pop ABBA «retorna» a los escenarios en 2022, cuatro décadas después de su separación. La tecnología tiene mucho que ver en este empeño
«Te lo prometo, ABBA nunca se reunirá. No podría soportar el estrés de decepcionar a todos. Cuando escuchas nuestra música, ¿no hay algo bueno en tener la imagen de cuatro personas jóvenes y enérgicas? Mejor que cuatro geriátricos, eso es seguro».
La declaración la hizo en 2013 Bjorn Ulvaeus, uno de los integrantes del grupo ABBA. Dice el refrán que nunca digas nunca. Y en este caso se cumple: la popular banda pop está de vuelta. El pasado 5 de noviembre vio la luz Voyage, su nuevo disco. Y en mayo de 2022, 40 años después de su separación, será posible disfrutar nuevamente de ellos «en vivo», gracias a la tecnología.
«Al principio eran solo dos canciones y luego dijimos: “Bueno, tal vez deberíamos hacer algunas más”», explicó Benny Andersson, otro de los integrantes de ABBA, en una conferencia de prensa transmitida en vivo a través de YouTube hace un mes.
Así nació Voyage, un álbum con diez temas nuevos, y se maduró la idea de que junto a Bjorn, Anni-Frid Lyngstad y Agnetha Fältskog hicieran nuevamente presentaciones en vivo.
«Hace cuatro o cinco años nos sugirieron que podríamos hacer un tour como hologramas. Pero luego descubrimos que no era posible. Sin embargo, la idea de tener nuestros avatares digitales estaba ahí». Quien vino a materializarla fue Industrial Light and Magic, empresa fundada por George Lucas —el creador de Star Wars—, a partir del uso de la tecnología para «rejuvenecer» a los suecos y volverlos a presentar al mundo en toda su gloria.
En Estocolmo, Suecia, hay un estudio llamado Riksmixningsverketen. Fue en ese lugar de nombre impronunciable para un hispanohablante en el que, por cinco semanas y en sesiones de hasta diez horas, el grupo grabó y capturó todas las canciones del nuevo tour.
Todo comenzó en 2018, cuando los cuatro se reunieron primero en el estudio de grabación de Benny. Allí volvieron a encenderse las brasas de lo que alguna vez fue el grupo pop más popular sobre la Tierra. Luego de grabar I Still Have Faith In You —uno de los nuevos temas de Voyage—, decidieron seguir adelante con la idea.
Entonces entró en escena Industrial Light and Magic. Más de 850 personas trabajaron en la captura de todos los movimientos, gestos, manierismos y características de cada uno de los miembros de ABBA.
Para ello usaron esos trajes llenos de bolas de plástico tan característicos de la tecnología de captura de movimientos, muy usuales en la industria de los videojuegos y el cine. Nacían los «ABBAtares», una reproducción digital de los artistas tal y como lucían en 1979.
El procedimiento no es nuevo. Se ha usado para rejuvenecer a actores en muchas películas o series recientes, como el final de la segunda temporada de The Mandalorian —y no digo más por si acaso alguien no ha visto todavía lo que allí sucede—.
Sin embargo, Industrial Light and Magic quería que fuera lo más fidedigno posible. Por eso «Agnetha, Frida, Benny y Bjorn subieron al escenario frente a 160 cámaras y casi la misma cantidad de genios de efectos visuales, y tocaron cada canción en este espectáculo, a la perfección», explicó el productor Ludvig Andersson.
«Entonces, cuando vean el show, no son cuatro personas fingiendo ser ABBA, en realidad son ellos», acotó.
Cuando el 27 de mayo de 2022 se realice el primer concierto de ABBA en 40 años, los organizadores quieren que se sienta lo más real posible. Si bien lo logrado por Industrial Light and Magic a priori luce impresionante con el rejuvenecimiento de los cantantes, se requiere de algo más.
Y ese «algo más» es el estadio temporal que se construye para la ocasión, el ABBA Arena, al este de Londres, en una zona que se conoce como Queen Elizabeth Olympic Park.
El lugar cuenta con capacidad para 3 000 personas y albergará las actuaciones digitales desde mayo hasta septiembre.
Pistas de baile, quioscos de comida, bebidas y entretenimiento envolvente están entre las ofertas del nuevo escenario. Los reportes de prensa indican que los asistentes al concierto verán a una banda de diez integrantes actuar junto a los «ABBAtares».
El ABBA Arena es un teatro temporal mayoritariamente de madera. Ha sido diseñado para ser desmontable y reutilizable. El auditorio principal del lugar crea un «espacio interior despejado de 61 metros y permite una experiencia de inmersión en 360 grados», según los organizadores.
Hacer que los «ABBAtares» luzcan reales en el mundo físico y que desaparezcan las barreras con el mundo digital es la misión de los organizadores. De acuerdo con Svana Gisla, productora del show, la luz inteligente y el sonido envolvente son los elementos principales para romper esa barrera y crear la ilusión perfecta.
Bjorn y Benny declararon en la mencionada conferencia de prensa a través de YouTube que el nuevo concierto tendrá las canciones de Voyage y todos los grandes éxitos de ABBA.
Si este empeño llega a convertirse en un éxito —más allá de los valores musicales que aporte el nuevo disco, o no—, quizá la industria de la música podría atestiguar el regreso de muchos retirados todavía vivos.
Hasta hoy lo que se ha intentado en este sentido es hacer retornar del más allá a estrellas musicales, como Whitney Houston o Tupac, por ejemplo. Los resultados han dejado sentimientos encontrados. Ojalá y los «ABBAtares» marquen un punto de giro en este sentido, para estar todavía más agradecidos por la música.
El ABBA Arena es el escenario para la reaparición del grupo sueco, el cual, según los organizadores, borrará las barreras entre el mundo físico y el digital. Fotos: ABBA Voyage
El grupo ABBA vuelve a los escenarios 40 años después, pero con un toque virtual.