Alexander Bortnikov, jefe del Servicio Federal de Seguridad de Rusia. Autor: Prensa Latina Publicado: 09/04/2024 | 11:13 am
Moscú, abril 9. — El ataque terrorista en Moscú es una señal de que los neonazis ucranianos se aprovecharon de miembros de organizaciones terroristas internacionales en territorio ruso, afirmó este martes Alexander Bortnikov, jefe del Servicio Federal de Seguridad.
Según manifestó el alto cargo ruso, los neonazis ucranianos y sus patrocinadores occidentales organizan la comisión de esos crímenes bárbaros en territorio de la Federación utilizando diversos métodos, solo con el objetivo de dañar a Rusia, destacó Prensa Latina, citando al rotativo digital Vzgliad.
Bortnikov también afirmó que se utilizó como perpetradores a miembros de una organización terrorista clandestina. Anteriormente, los acusados del ataque terrorista al Crocus City Hall en Moscú nombraron a sus coordinadores.
Después del incidente, la televisión rusa mostró imágenes del interrogatorio de los criminales. En el vídeo, los detenidos dijeron que recibieron instrucciones un tal Saifullo desde Kiev, quien prometió pagarle un millón de rublos a cada uno después de llevar a cabo el ataque y llegar a Ucrania.
Fondos canalizados por empresa ucraniana Burisma se usaron para atentados terroristas en Rusia
Los fondos canalizados a través de la compañía ucraniana de petróleo y gas Burisma Holdings se utilizaron para llevar a cabo ataques terroristas en Rusia, según afirmó este martes el Comité Estatal de Investigación ruso, señala RT.
«Se ha establecido que los fondos se recibieron a través de organizaciones comerciales, especialmente la compañía ucraniana de petróleo y gas Burisma Holdings, que ha sido utilizada en los últimos años en actos terroristas llevados a cabo en la Federación Rusa y en el extranjero para eliminar a destacadas figuras políticas y públicas y causar daños financieros», dijo la organización en un comunicado.
Rusia lanzó el investigación a raíz de una petición de un grupo de parlamentarios sobre sobre la financiación de actividades terroristas por parte de altos funcionarios de EE.UU. y de países de la OTAN. Como resultado, se abrió una causa penal por un delito tipificado en la parte 4 del artículo 205.1 del Código Penal de Rusia (financiación del terrorismo).
Actualmente se está llevando a cabo una investigación. Se centra en las fuentes y los movimientos posteriores de varios millones dólares, así como en individuos en algunos países occidentales. Además, se investigan los vínculos entre los autores directos de actos terroristas y «promotores, organizadores y patrocinadores extranjeros».
Hunter Biden, hijo del presidente de EE.UU., se vio implicado en un escándalo previo debido a una investigación que indicaba que había recibido pagos millonarios de Burisma Holdings, compañía en la que formó parte de su junta directiva.