DAVOS, enero 24.— El proteccionismo comercial estadounidense y la sostenibilidad en los intercambios centraron los análisis durante la segunda jornada del 48vo. Foro Económico Mundial, que reúne a la élite económica y política para debatir problemas que enfrenta el mundo actualmente.
Mientras el secretario del Tesoro de Estados Unidos, Steven Mnuchin, rechazaba que su país transformara al proteccionismo en política de Estado y aseguraba que su Gobierno está abierto a los negocios, otros como la canciller alemana Ángela Merkel y el presidente francés Emmanuel Macron reforzaron su alianza multilateral frente al aislacionismo de Donald Trump, al afirmar ambos en sus discursos la necesidad de construir un nuevo proyecto europeo.
«El proteccionismo no es la solución», expresó Merkel.
Mnuchin, por su parte, hizo sus declaraciones en una rueda de prensa a la que acudió acompañado por el secretario de Comercio, Wilbur Ross, y durante la cual negó que la agenda del presidente Trump, cuyo lema es América primero, esté en contradicción con el deseo de establecer acuerdos de comercio bilaterales en todo el mundo, reseñó PL.
Los puntos de vista divergentes en torno al mandatario estadounidense no se circunscriben a la reunión.
Más de mil activistas marcharon en distintas ciudades de Suiza la noche del martes contra el Foro y contra la anunciada presencia de Trump. Desde ecologistas hasta protestantes antiglobalización, se estima que más de 1 500 personas, se dirigieron hacia esta localidad, sede del evento, aunque a la hora de las protestas solo había llegado aproximadamente la mitad.
A 40 kilómetros de la urbe, enfrentamientos violentos con autoridades suizas impidieron el avance de los manifestantes. Según El País, la policía utilizó cañones de agua para disolver la multitud.
Principal blanco de las protestas, el Presidente de Estados Unidos inspiró diversas pancartas donde se leía «Trump no es bienvenido» y «No a Trump, no al carbón, no al gas, no a los combustibles fósiles». La presencia del jefe de la Casa Blanca en el Foro ya provocaba polémica desde hacía dos semanas, cuando una petición online reunió más de 17 500 firmas contra su llegada a ese país.
A pesar de las críticas generalizadas en el extranjero, Trump mantiene en agenda un discurso en el Foro para el viernes. La portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders, sin embargo, admitió que su presencia en la cita probablemente no se concretará, debido a los problemas presupuestarios en el Congreso.