Cráter dejado por el meteorito tras su caída en la zona de los Urales en Rusia. Autor: Russia Today Publicado: 21/09/2017 | 05:30 pm
CHEBARKUL, Rusia, febrero 18.— Científicos rusos hallaron este lunes fragmentos del meteorito que se estrelló el pasado viernes en la región de los Urales causando múltiples destrozos y más de un millar de heridos.
El hallazgo se produjo en el lago Chebarkul, al que se precipitó uno de los aproximadamente siete trozos en los que se desintegró el meteorito tras explotar en el aire, reveló el experto de la Universidad de los Urales, Víctor Grojovski.
Según Grojovski, alrededor del orificio de ocho metros que dejó la caída en la superficie helada del lago, se recogieron fragmentos de una sustancia sólida y negra, similar a la roca, de entre 0,5 y un centímetro de diámetro.
En total, se recuperaron 53 fragmentos que contienen «todos los minerales típicos» de un meteorito rocoso o condrita ordinaria, como «el hierro metálico, el olivino o los sulfitos», agregó Grojovski.
Los fragmentos hallados contienen una proporción de 10 por ciento de hierro, según precisó el equipo de la Universidad de los Urales.
El investigador adelantó que los científicos rusos propondrán incluir el meteorito en el registro internacional bajo la denominación de Chebarkul, que es el nombre de la localidad más próxima al lugar de la caída.
La lluvia de meteoritos, como también se ha conocido el inusual suceso del viernes, afectó las ciudades rusas de Cheliábinsk y Chebarkul, las vecinas provincias de Tiumén, Kurgan y Sverdlovsk y zonas del norte de Kazajstán; aunque la región de Cheliábinsk —en particular su capital— fueron las más afectadas.
La onda expansiva creada por la explosión rompió ventanas de unos 5 000 edificios, en los que residen unas 100 000 familias. Al menos 2 240 personas solicitaron asistencia sanitaria, entre ellas 299 niños, y 52 personas fueron ingresadas en hospitales, 13 de ellas niños.
Pese a que la gran mayoría de heridas fue causada por vidrios, 21 pacientes se encuentran en estado de gravedad moderada.
Tras el evento, unos 24 000 obreros de emergencia y voluntarios trabajaron intensamente para reparar las ventanas destruidas, antes de la reanudación de las clases y de la semana laboral.
Según estimaciones previas, los daños económicos ocasionados a la provincia ascienden a 33 millones de dólares.
La caída del meteorito, desde su entrada en la atmósfera hasta la desintegración, duró 32,5 segundos. Según la NASA, el cuerpo celeste era de 17 metros y pesaba 18 000 toneladas. Al explotar liberó una cantidad de energía 30 veces superior al bombardeo atómico de Hiroshima.