ESTOCOLMO, mayo 25.— La sucursal en Panamá de la compañía Ericsson, mayor fabricante mundial de equipos de redes móviles, tendrá que pagar una multa millonaria al Gobierno de Estados Unidos por violar el bloqueo impuesto a Cuba, informó hoy Radio Suecia.
La empresa de origen sueco deberá abonar un millón 750 mil dólares al Departamento de Comercio estadounidense por vulnerar las restricciones de exportación contra la Isla, las cuales se mantienen vigentes desde hace medio siglo con el objetivo de crear situaciones de carestía en el pueblo cubano.
El presunto delito de la compañía fue el de enviar equipos rotos de Cuba a los Estados Unidos para su reparación, tras ocultar el origen de los mismos, para después retornarlos ya arreglados a la nación caribeña.
No obstante, bajo presión del gobierno estadounidense, Ericsson de Panamá reveló voluntariamente las violaciones cometidas, a raíz de una investigación del Departamento de Comercio, por lo cual la empresa escandinava llegó al acuerdo de pagar una multa millonaria.
De acuerdo con un comunicado, la dependencia panameña de Ericsson sabía que las exportaciones de los Estados Unidos a Cuba eran ilegales, pues había sido notificada por la casa matriz de las severas restricciones impuestas a la Isla por Washington.
Los tres empleados que supuestamente realizaron negociaciones con Cuba fueron despedidos después de que el plan fuera descubierto, dijo un portavoz de la compañía.
El bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos contra el país caribeño desde hace 50 años es el más prolongado que se conoce en la historia moderna.