Vista aérea de la central nuclear de Fukushima. Autor: Reuters Publicado: 21/09/2017 | 05:16 pm
TOKIO, febrero.— Una investigación especial determinó hoy que el gobierno japonés ocultó información a su población y la comunidad internacional sobre todo del peligro del desastre de la planta nuclear de Fukushima, según PL.
Acorde con la Fundación Iniciativa para Reconstruir Japón, los dirigentes del ejecutivo minimizaron los riesgos sobre las fusiones del núcleo de los reactores durante marzo del 2011 en la planta nuclear Fukushima Dai-ichi, tras un destructor terremoto y un maremoto el 11 de ese mes.
El estudio, publicado en esta capital y encargado por el entonces primer ministro Naoto Kan, considera que esta interferencia en las labores de Tokyo Electric Power (TEPCO), propietaria de la planta, «solo causó una confusión innecesaria y aumentó el riesgo de agravar la situación».
El reporte, recopilado durante seis meses en base a entrevistas con más de 300 personas, comunica que el gobierno consideró en cierto momento la posibilidad de la destrucción de Tokio tras las explosiones nucleares consecutivas al accidente de la central nuclear.
El portavoz del gobierno en ese momento Jukio Edano indicó a los investigadores: que «pensó en una sucesión de hechos diabólico» en la cual los reactores nucleares habrían explotado uno tras otro. «Si eso sucedía, era el fin de Tokio».
En otra parte el documento de más de 400 páginas valora la actuación del ex jefe de gobierno Naoto Kan y afirma que causó una «confusión innecesaria» que pudo «agravar la situación».
Ese panel de seis expertos, encabezados por el presidente de la Comisión japonesa de Energía Atómica, Shunsuke Kondo, entrevistó a miembros de su gabinete y a funcionarios del Gobierno para compilar el informe.
Como ejemplo de estas intervenciones directas de Kan y su equipo, que según los especialistas «resultaron ineficaces» para cerrar la crisis, cita el retraso a la hora de inyectar agua marina en los reactores afectados por el tsunami.
La demora se debió, según explica el documento, al empeño del equipo de Kan en inyectar agua dulce en vez de salada en las unidades de fusión afectadas por el desastre.
El reporte explica que tanto Kan como sus consejeros desconocían los contenidos específicos de los manuales en caso de desastre y también el sistema creado por el Gobierno para intentar predecir la propagación de materiales radiactivos.