Santiago de Chile, 22 de septiembre._ Estudiantes y trabajadores chilenos esperan reeditar este día otra multitudinaria jornada de protesta nacional en demanda de cambios de fondo en el modelo sociopolítico y en rechazo a la postura asumida por el gobierno en materia educacional.
Luego de cuatro meses de masivas movilizaciones se estima en más del 80 por ciento el apoyo de la población chilena a las demandas del estudiantado y el magisterio a favor de una educación pública, gratuita y de calidad y en contra del lucro en el sistema de enseñanza.
Para este día están previstas manifestaciones en las principales avenidas y plazas cívicas del país, incluida una nueva marcha por la Alameda de Santiago y un acto central en el Parque Almagro de esta ciudad, convocado por la Confederación de Estudiantes de Chile (Confech).
El presidente de la Confederación de Trabajadores del Cobre, Cristian Cuevas, aseguró que los empleados contratistas de las principales divisiones de la estatal cuprífera Codelco apoyarán con manifestaciones de diferente tipo la movilización social en reclamo de cambios estructurales en el modelo educacional.
A juicio de Cuevas, el gobierno chileno debe abandonar la posición intransigente en que se encuentra y acabar de entender las transformaciones de fondo que requiere la educación en Chile
Este modelo no da respuestas a las demandas de los estudiantes porque reproduce las desigualdades y promueve un verdadero apartheid en la educación, enfatizó Cuevas.
Han manifestado de igual modo su respaldo a la nueva jornada de protestas la Asociación Nacional de Empleados Fiscales, el Colegio de Profesores, las organizaciones defensoras de los derechos humanos en Chile, agrupaciones ecologistas y dirigentes y parlamentarios de los partidos de la oposición.
Ayer unas 60 organizaciones aglutinadas en un frente común denominado Democracia para Chile se adhirieron al paro nacional de este jueves y llamaron a un plebiscito que permita encauzar una Asamblea Constituyente y una nueva Constitución para el país que derogue en consecuencia la actual, impuesta en la dictadura. De hecho, el Movimiento Social por la Educación en Chile cuestiona las bases fundamentales del ordenamiento político y económico que se aprobó en 1980 en pleno régimen militar de Augusto Pinochet (1973-1990).
Carolina Espinoza, dirigente sindical de la atención primaria de la salud en Chile, dijo estar convencida de la alta adhesión de la ciudadanía al nuevo llamado de movilización del estudiantado chileno.
Los jóvenes le devolvieron la esperanza al pueblo chileno y tenemos que estar con ellos en esta batalla, afirmó Espinoza.
El reinicio de las movilizaciones en el país suramericano se produce a una semana del rechazo del Ejecutivo a las garantías solicitadas por Confech y el magisterio para el desarrollo de una instancia de diálogo sobre el tema educacional.