BRUSELAS, julio 13.— Alemania logró este miércoles que la cumbre urgente de jefes de Estado y Gobierno sobre la crisis de la deuda en la eurozona —el grupo de países con el euro como moneda—, que estaba prevista para este viernes, quedara aplazada unos días, según fuentes diplomáticas comunitarias a las que tuvo acceso DPA.
El presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy —con el apoyo, entre otros, de España—, impulsaba la iniciativa de una cumbre extraordinaria urgente, con el objetivo de frenar los ataques de los mercados y de las agencias de calificación sobre Grecia, Irlanda y Portugal (rescatados por la UE y el FMI), y ante el riesgo de contagio a Italia y España.
Lo más probable es que la reunión de los 17 socios de la eurozona se produzca a principios de la semana que viene, trascendió.
Alemania y Holanda se opusieron desde el primer momento a la idea de Van Rompuy, apoyada entre otros por el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, quien pidió «responsabilidad» a las grandes potencias de Europa, aunque sin mencionar directamente a Alemania.
La preocupación de la UE se centra en la interminable crisis de endeudamiento de Grecia, por las dificultades para cerrar un segundo paquete de ayuda al país mediterráneo, tras los 110 000 millones aprobados el año pasado por la UE y el FMI, que sin embargo no han bastado para disipar el riesgo a una suspensión de pagos de Atenas.