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Cuba reclamó este lunes voluntad política en los mecanismos de cooperación internacional, al argumentar que los países en desarrollo están atrapados en una complicada madeja de herramientas económicas y financieras, informa PL.
Durante su intervención en el Consejo Económico y Social (Ecosoc) de Naciones Unidas que sesiona aquí, el delegado cubano Yusnier Romero subrayó que actualmente se perpetúa la dependencia y se canalizan los flujos financieros a favor de los ricos.
Los poderosos, dentro de una nueva coyuntura internacional, lograron alterar las prioridades de la «responsabilidad internacional hacia lo nacional», haciendo recaer el peso en la movilización de los recursos internos de los más pobres, puntualizó.
El diplomático, al hablar sobre el tema, recalcó que cualquier acción de cooperación internacional para el desarrollo debe tener como principio inviolable el respeto al derecho de los gobiernos a decidir prioridades nacionales, sin condicionamientos.
En la jornada, que debatió el asunto, Cuba expuso que la voluntad política de los donantes es elemento indispensable para el necesario incremento de los recursos financieros.
Romero resaltó la coincidencia con la idea de que todos los países deben poner en orden los aspectos fundamentales de su economía, pero anotó que se obvia el diseño de la política determinado por la condicionalidad impuesta por el FMI y el Banco Mundial.
«Cuba considera que cada país debe ser libre de aplicar soluciones específicas a sus problemas particulares, bajo el principio de respeto a la soberanía y al tipo de sistema socio-económico», remarcó.
Asimismo, mencionó la trascendencia de la cooperación Sur-Sur y los proyectos triangulares, al tiempo que recordó el crudo bloqueo económico que sufre la Isla por parte de Estados Unidos desde hace más de 50 años.
