KABUL, junio 4.— Cuatros soldados de la OTAN murieron hoy en el este de Afganistán por la explosión de una bomba casera, mientras un policía italiano perdió la vida a manos de supuestos civiles, cerca de esta capital, revelaron fuentes oficiales.
Autoridades de la norteña provincia de Panjshir, próxima a Kabul, informaron que un agente del orden italiano que hacía turismo en esa zona falleció al involucrarse en un incidente con aldeanos locales.
De acuerdo con un comunicado emitido por el Ministerio de Exteriores de Italia en Roma, el occiso laboraba en la embajada de su país situada en esta capital, como experto antidroga.
El gobernador de esa localidad, Keramuddin Keram, explicó que la acción tuvo lugar cuando el policía extranjero paseaba con una mujer y presenció una discusión de una pareja afgana, sacó el revolver y le disparó al hombre hiriéndolo.
Al intentar llevar el herido al hospital, los familiares salieron al paso y dispararon a muerte al uniformado italiano, cuyo cadáver fue trasladado a la base aérea internacional de Bagram, cercana a Kabul.
Cuatro miembros de las tropas de la Fuerza Internacional de Asistencia para la Seguridad (ISAF), comandado por Organización del Tratado Atlántico Norte, fallecieron tras la detonación de un explosivo casero ubicado en el este del país.
Aunque la ISAF no dio detalles de los hechos, en su mayoría, los soldados de esta agrupación desplegados en esa zona, la más conflictiva del país por estar junto a la frontera paquistaní, son estadounidenses.
En lo que va de año, unos 200 soldados extranjeros de la alianza han perdido la vida en Afganistán, 55 de ellos en mayo último.
Los actos violentos se han incrementado luego que los talibanes anunciaran su «ofensiva de primavera» en un intento por sacar de la nación las tropas de ocupación.