QUITO, mayo 23.— Con el anuncio oficial esta semana de los resultados del referendo y consulta popular, donde ganó claramente el Sí en las 10 preguntas, Ecuador inicia una nueva etapa que estará marcada por la aplicación del mandato de las urnas.
El 7 de mayo pasado más de cuatro millones de ciudadanos votaron por el SÍ y en el conteo de los votos válidos, como establece la Constitución. El respaldo a la propuesta del Ejecutivo alcanzó un 53,4 por ciento frente a un 46,6 por ciento que votaron por el No.
Según el análisis hecho por el presidente ecuatoriano, Rafael Correa, este sábado en su cadena radiotelevisiva habitual, esto representa alrededor de 500 mil votos más que en las elecciones presidenciales de 2009, donde ganó con el 51,99 por ciento de los votos válidos.
Este inicio, señaló recientemente Gustavo Baroja, dirigente nacional del Movimiento Alianza PAIS, es la búsqueda para fortalecer los principios fundamentales de la Revolución Ciudadana: justicia, solidaridad y transparencia.
Aún cuando el triunfo de la propuesta hecha permitirá transformar el ineficaz sistema judicial, profundizar la lucha contra la corrupción y el enriquecimiento ilícito, y eliminar los conflictos de intereses entre banqueros y medios de comunicación, su aplicación es compleja.
Las cinco primeras preguntas tenían carácter de referendo y significan enmiendas a la Constitución, algunas de las cuales requerirán modificación de leyes, como la de procedimiento penal, y para ello hace falta una mayoría simple de 63 votos parlamentarios.
Al no contar con esa cantidad, la bancada gobernante del Movimiento Alianza PAIS junto a sus aliados traslada el escenario político al pleno de la Asamblea Nacional, cuya dirección será la encargada de lograr el consenso mínimo para aprobar los cuerpos legales.
Al mismo tiempo, se requiere un análisis, y como dijo Baroja, establecer conversaciones y lograr acuerdos mínimos con movimientos sociales, «porque no podemos concebir la Revolución Ciudadana sin el aporte del sector indígena y de la clase trabajadora».
Y en esta etapa hasta el 2013 no es menos importante el fortalecimiento orgánico del Movimiento Alianza PAIS, inscrito con más de un millón y medio de firmas, pero cuyo reforzamiento estructural es clave para obtener las próximas victorias.