Defensores del medio ambiente en Chile protestaron contra el proyecto HidroAysén, que pretende construir cinco centrales hidroeléctricas en la nación andina. Autor: Reuters Publicado: 21/09/2017 | 05:09 pm
Con más de 100 personas detenidas culminaron las manifestaciones del lunes contra la reciente aprobación del proyecto HidroAysén, que contempla la construcción de cinco plantas hidroeléctricas en la región de Aysén, ubicada a unos 1 800 kilómetros al sur de la ciudad de Santiago, y que ocasionará la devastación de miles de hectáreas de la Patagonia que quedarán inundadas.
Fuentes policiales informaron que en Providencia (Oriente), específicamente en el sector plaza Italia, hubo un total de nueve personas detenidas que fueron enviados hasta la 19ª Comisaría de esa comuna, donde a partir de este martes quedarán a disposición de la Fiscalía Metropolitana Oriente por los delitos de desórdenes y daños.
Por la misma causa serán puestos a disposición de la Fiscalía Centro-Norte un total de 54 personas que fueron arrestadas en las inmediaciones del Palacio de La Moneda (Región Metropolitana), entre ellas 37 hombres y 17 mujeres.
En la manifestación contra el proyecto hidroeléctrico participó el diputado Patricio Vallespín (Democristiano), quien acusó al ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, como «culpable» de la votación. Además, criticó la «violencia innecesaria» con la que se disipó la protesta.
«No solamente está la violación de nuestra institucionalidad ambiental que se ha puesto al servicio de un mega proyecto y no al servicio del país, no solamente han habido conflictos de intereses, no solamente se han modificado a última hora estudios, sino que este proyecto no cuenta con los más mínimos elementos para poder decir que es un proyecto justo ecuánime», denunció el diputado a través de Telesur.
De igual forma, la directora de la ONG Fundación Terram, Flavia Liverona, denunció que «con la instalación de este proyecto no sólo se destruyen ecosistemas sino también posibilidades de empleo fundamentalmente asociados al turismo».
A pesar del recrudecimiento de la protestas de calle, la ministra de Medio Ambiente, María Ignacia Benítez, defendió el proceso de evaluación de impacto ambiental del proyecto energético de HidroAysén, señalando que cumple con las legislaciones ambientales vigentes. «Se tomó en cuenta la mitigación y reparación, resultando con un estándar mucho más exigente de lo que ingresó (...) está todo conforme de acuerdo a las legislaciones ambientales vigentes».
Benítez sostuvo que «todos los proyectos generan impactos y lo que se trata de hacer es que a medida que se va evaluando se va viendo que estos sean compensados y mitigados bajo la normativa vigente».
Este martes, las acciones de las generadoras Endesa Chile y Colbún se encuentran dentro de las más transadas en la Bolsa de Santiago, luego que La Comisión de Evaluación Ambiental (CEA) aprobara, este lunes, el polémico megaproyecto HidroAysén, impulsado por ambas firmas en el sur del país.
La primera de ella se transaba en montos de 1 407 millones de dólares, mientras que la segunda se negociaba a 1 060 millones de dólares.
El sector eléctrico impulsó al índice referencial local IPSA, que subía un 0,26 por ciento a 4 834,38 puntos en los primeros negocios.
El proyecto HidroAysén, que ha enfrentado una fuerte oposición de ambientalistas, contempla la construcción de cinco centrales que demandarán una inversión de unos 3 500 millones de dólares y producirán 2 750 megavatios en total. Esto lo que convierte en el proyecto hidroeléctrico de mayor envergadura en Chile, que generará un gran impacto ecológico en los ríos Baker y Pascua.
Un sondeo de opinión realizado en el mes de abril revela que 61 por ciento de los chilenos se oponen al proyecto.
La constitución de Chile, redactada en la dictadura de Augusto Pinochet, es la única del mundo que consagra el derecho de aprovechamiento privado de las aguas. La sociedad civil anunció recursos judiciales para intentar frenar el proyecto en los tribunales.