Un fuerte terremoto de 7,2 de magnitud con epicentro en Baja California, México, sacudió este domingo la frontera mexicano-estadounidense y se sintió en una amplia zona de ambos países que incluyó hasta Los Angeles, indicó el instituto geofísico estadounidense (USGS), informa la agencia AFP.
Diversos reportes de prensa en Estados Unidos indican que el temblor sacudió rascacielos de Los Angeles y San Diego y se sintió hasta en Las Vegas, Nevada, en tanto en México el Servicio Sismológico Nacional (SSN) no ocultó su temor de que haya causado daños importantes, aunque no tenía informes de ello.
En un primer momento, se había anunciado una magnitud de momento de 6,9, luego reevaluada a 7,2 por el USGS y por el SSN.
«Es una magnitud importante con potencial de generar algunos daños porque no está muy lejos de la población», explicó el jefe del SSN, Carlos Valdez, a la AFP.
Según el SSN, el temblor se produjo a unos 18 kilómetros al sureste de la capital de Baja California, Mexicali, un municipio limítrofe con Estados Unidos de unos 900.000 habitantes.
La profundidad del sismo fue de 32,3 kilómetros. El USGS ubicó el epicentro a 26 kilómetros al sur-suroeste de la localidad de Guadalupe Victoria.
Se estaban reportando fallas en las líneas de comunicación de Mexicali y la cercana Tijuana. El SSN también perdió el contacto con su sensor en Mexicali minutos después del sismo.
La prensa mexicana estaba informando de escenas de pánico y algunos desmayos en Tijuana pero no de heridos o daños graves en infraestructuras.
El movimiento telúrico también se sintió en una amplia zona de Estados Unidos, con sacudidas en las ciudades de San Diego y Los Angeles en California, Phoenix, Arizona y Las Vegas, Nevada.
El diario Los Angeles Times informó poco después que el temblor sacudió edificios en las ciudades de Los Angeles y San Diego en el sur de California, al igual que otras localidades del vecino Arizona.
Según el Times, las atracciones del parque Disneyland de Anaheim fueron cerradas como medida provisoria.
El canal de televisión KABC de Los Angeles indicó que varios rascacielos de la ciudad se sacudieron con fuerza y que el cuerpo de bomberos local respondía en estos momentos a varios llamados por personas atrapadas en elevadores.
También se verificaban las infraestructuras de transporte, los edificios de viviendas así como las líneas eléctricas, ya sea las que están enterradas o las aéreas, para garantizar que todos estos elementos estén seguros.
Sin embargo no hubo reportes de heridos, daños importantes o cortes de energía.
El USGS agregó que el sismo fue percibido incluso en Las Vegas, Nevada, a unos 460 kilómetros al norte del epicentro, y en Phoenix, Arizona, 300 kilómetros al noreste.
Para medir la fuerza de un sismo, el USGS usa la «magnitud de momento» (Mw). Un terremoto que alcanza al menos 6 en esta escala abierta, es considerado como fuerte.
Los sismos más potentes de los últimos veinte años en California se remontan a 1992 y 2005. Ambos tenían una magnitud de 7,2. Asismismo, del lado mexicano, Baja California sufre frecuentes temblores sísmicos.
Por su parte, EFE precisó la existencia de varios heridos, once incendios y una carretera colapsada, en Baja California, norte de México.
El sismo fue el de mayor magnitud desde el de 7,3 grados registrado en 1992 en Landers, en California, de acuerdo con Lucy Jones, del Laboratorio Sismológico Caltech.
El terremoto, que se sintió además en California y en Arizona, fue seguido de varias réplicas y temblores, tanto en México como en EEUU, donde algunas autoridades de las ciudades cercanas a la frontera con el país vecino han puesto en alerta a dispositivos de los departamentos de bomberos y de protección civil.
Según EFE, después del sismo, hubo múltiples réplicas: de 3,9; 3,6 y de 3,5 grados en Seeley (California); de 3,4 en Holtville (California), de 4,7 en Mexicali (México), de 4,3 en Calexico (California), de 5,1 y de 5,4 grados en Guadalupe Victoria (México), de 5,1 en Imperial (California) y de 4,5 grados en Jacumba Hot Springs (California).