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Presionada por una fuerte sequía provocada por el fenómeno climático El Niño, Venezuela inició la creación de un sistema de generación de electricidad alterno al utilizado hasta hoy, dependiente en 70 por ciento de hidroeléctricas, destaca Prensa Latina en su sitio web.
El cambio climático, del cual El Niño es expresión, convirtió en una debilidad la que debería ser una fortaleza de su sistema energético con el peligroso descenso de las fuentes de agua.
Los especialistas se centran ahora en El Guri, el mayor embalse del país, que desciende hasta 13 centímetros diarios y amenaza con llegar al punto de colapso que le impedirá generar electricidad.
Ante la ausencia de lluvias y de pronósticos de precipitaciones, las autoridades se vieron obligadas a imponer medidas de cortes del servicio eléctrico en algunas zonas, al tiempo que emprendieron un plan de desarrollo alternativo.
Desde este miércoles una comisión técnica de Argentina dará asesoría en el desarrollo de fuentes alternativas de generación de electricidad y técnica en ahorro energético, en lo cual se suman a expertos cubanos que asesoran desde hace varias semanas.
Un recién creado Estado Mayor Conjunto Eléctrico anunció también la realización en el primer semestre del año de más de 30 proyectos de generación que significarán dos mil megavatios más al sistema eléctrico nacional.
En total, hasta 2015 se espera instalar capacidades por 15 mil megavatios de diversas fuentes, lo cual duplicaría los niveles nacionales actuales.
El vicepresidente venezolano, Elías Jaua, explicó que el objetivo es asumir la eventualidad que El Guri no pueda seguir funcionando y más allá de la coyuntura tener un sistema alterno.
El plan cuenta con un fondo anunciado por el presidente Hugo Chávez de mil millones de dólares para obras, sobre las cuales ya firmas de Rusia, China, Brasil y otros países entregan propuestas.
Paralelamente, un decreto de emergencia eléctrica estableció un sistema de estímulos y penalizaciones para estimular el ahorro, que los técnicos estiman debe llegar al 20 por ciento del consumo.
Para ello se estableció el descuento en la factura de 25 a 50 por ciento para quienes disminuyan el consumo de 10 a 20 por ciento y penalizaciones para quien lo incremente más del 10 por ciento ante el fenómeno climático que afecta las fuentes de agua en el país.
