Condoleezza y Mijaíl: la mirada lo dice todo. Foto: AFP BRUSELAS, agosto 15.— El embajador ruso en la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) advirtió el viernes a los miembros de la alianza que no corten sus lazos con Moscú por su actuación militar en Georgia, por considerar que la medida perjudicará a ambas partes, reportó AP.
Dmitri Rogozin acusó a EE.UU. de amenazar con «destruir» el Consejo OTAN-Rusia, establecido en 2002 para mejorar las relaciones bilaterales.
«A través de los medios de información nos hemos enterado de que los estadounidenses amenazan con destruir el Consejo OTAN-Rusia, para castigar a Rusia», indicó el embajador a los periodistas. «Pero ¿quién necesita este Consejo OTAN-Rusia? Es un interés común».
EE.UU. ha convocado para el martes una reunión de emergencia de cancilleres de la OTAN para analizar la crisis en Georgia. Diplomáticos occidentales acreditados en Bruselas dijeron que la reunión analizará el futuro de las relaciones de ese pacto militarista con Moscú, tras la guerra suscitada entre Rusia y Georgia por la invasión georgiana a la república de Osetia del Sur, hace una semana.
Sobre el creciente clima de hostilidades, el presidente ruso, Dmitri Medvédev, dijo este viernes que la instalación del escudo antimisiles estadounidense tiene como objetivo a Rusia, lo cual quedó demostrado el jueves con el acuerdo que firmaron EE.UU. y Polonia para instalar misiles interceptores en ese país ex socialista.
Según ANSA, el vicejefe del Estado Mayor ruso, general Anatoli Nogovitsin, dijo que Polonia hace que misiles extranjeros apunten hacia ella. «EE.UU. se ocupa de la defensa antimisilística propia y no de Polonia, mientras Polonia, desplegando el escudo espacial de EE.UU., se pone sola en la mira, al ciento por ciento. Está volviéndose objetivo de una respuesta», agregó el jefe militar, sin precisar si esa respuesta sería por parte de Rusia o de otro país.
Por otra parte, la secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice, reclamó durante una visita a Tiflis el inmediato repliegue de las tropas rusas aún desplegadas en Georgia.
«La retirada de las tropas rusas es lo principal», dijo Rice durante una conferencia de prensa tras reunirse con el presidente georgiano, Mijaíl Saakashvili, a quien aseguró que EE.UU. sigue impulsando la defensa de la integridad territorial de Georgia.
Rice también advirtió que la acción militar rusa modificará la relación de EE.UU. y otros países con el Kremlin: «Tiene implicaciones profundas», sentenció, y aseguró que cualquier negociación futura tendrá «los límites naturales de Georgia (...) como punto de partida», en alusión a las regiones separatistas de Abjasia y Osetia, que Georgia reivindica.
Entretanto, el presidente Saakashvili firmó en presencia de Rice la declaración de alto el fuego, aunque aclaró que no se trata de un acuerdo de paz definitivo y atribuyó «a Occidente» parte de la responsabilidad en el conflicto con Rusia, por «ignorar una y otra vez» la advertencia de una «agresión rusa».
Tras la firma del acuerdo, el presidente francés, Nicolás Sarkozy, apoyó una rápida convocatoria del Consejo de Seguridad de la ONU, para adoptar una resolución de ese órgano y definir un mecanismo internacional encargado de vigilar la aplicación de lo acordado.