Los ecuatorianos han protestado ante la corte electoral. Foto: AP QUITO, octubre 17.— Los primeros resultados oficiales difundidos por el Consejo Electoral de Ecuador cuando se había realizado el conteo manual y definitorio del 53,1 por ciento de las boletas, confirmaban que el presidente se decidirá entre Rafael Correa y Álvaro Noboa, en segunda vuelta.
La contabilización empezó a difundirse este martes luego del rompimiento del contrato con la empresa brasileña E-Vote, encargada de un conteo computadorizado, supuestamente rápido, que solo llegó a procesar el 70 por ciento de los votos debido a una alegada congestión del sistema, y en medio de las denuncias de fraude de los seguidores de Alianza País, el partido que postula a Correa, aunque tanto él como Noboa parecen convencidos de la necesidad de la segunda ronda.
Este martes al mediodía, el conteo manual atribuía a Correa el 25,09 por ciento del sufragio mientras el multimillonario, aspirante por el partido Renovador Institucional, acumulaba 25,08 por ciento, seguido del aspirante de Red Democrática-Izquierda Democrática, León Roldós, con 15,96 por ciento, informó PL; pero todavía faltaban por computarse la otra mitad del total de votos emitidos.
Por su parte, el presidente del Tribunal Supremo Electoral, Xavier Cazar, descartó el fraude y dijo que las denuncias en tal sentido fueron provocadas por los problemas en la entrega rápida de resultados, lo que despertó sospechas, afirmó.
En medio de la sostenida incertidumbre, que según algunos observadores ha profundizado la desconfianza de muchos ecuatorianos en las instituciones, Cazar intentó disuadir los reclamos de quienes, desde medios alternativos, piden la renuncia de todos los miembros del Tribunal y afirmó que en esa entidad «no ha existido nunca intención de fraude», al tiempo que llamó a participar en la consulta popular prevista para el 26 de noviembre, día del balotaje.
No obstante, EFE estimó que las denuncias de fraude de Alianza País, los desmentidos del Tribunal y el triunfalismo del partido de Noboa cedieron paso la víspera a los análisis de posibles alianzas políticas para la segunda vuelta.
En la continuación de su política demagógica, Noboa reanudó desde el lunes su campaña y estableció pequeños comités en zonas pobres para anotar a todas las personas interesadas en contar con una vivienda si gana la jefatura del Estado, mientras aboga por la firma de un Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos, apertura total a la inversión privada y el rompimiento de relaciones con Cuba y Venezuela, recordó PL.
En cambio, Correa aboga por reformas radicales en las estructuras del país con miras a beneficiar a los sectores sociales y acabar con la influencia de los partidos políticos en los poderes del Estado.