Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

X.Y.: ¿Si el hombre tiene el orgasmo y eyacula en la vagina de la mujer, sin condón, ella siente algo, siente algún placer?

Aproximarse a cada mujer como única y descubrir con ella sus condiciones de amor y goce, es lo más recomendable.

No está establecido que la eyaculación masculina tenga un efecto estimulante en la vagina femenina. De hecho, cada mujer tiene sus maneras de sentir muy singulares y lo que para unas es excitante, para otra pasa desapercibido o es molesto.

En el terreno erótico, el encuentro entre los cuerpos, se complementa con el encuentro subjetivo. De las significaciones atribuidas a cada acto, resta una cuota de goce. En ese sentido, para alguna mujer, el hecho de la desprotección, del derrame del líquido íntimo puede ser signo de amor, de su disposición a tener hijos con ella, de arriesgarse por ella y en ese sentido podría ser placentero. El mismo acto para otras puede representar descuido, suciedad, desinterés, prepotencia, etc. Asimismo, para muchas puede resultar desapercibido.

Aunque estamos en la época de los manuales y tenemos la ilusión de encontrar claves universales en casi todo; no es así en el amor como en tantas otras áreas de la vida.

Hay muchas razones, inconscientes la mayoría, para que un encuentro resulte vivificante, estremecedor y amoroso entre dos personas. De repente descubres algo que te gusta mucho, que quieres explorar y repetir con esa persona, sin que te suceda muchas veces en tu vida. Es entonces que decides. Pero este tipo de «descubrimiento» de lo que en verdad se disfruta, no sirve para todos. Mucho menos si se trata de las mujeres que suelen tener una relación singular con lo erótico, que va más allá de localizar un punto, un contacto, un líquido, un gesto particular. Más bien, cada una encuentra el suyo; aliñado en el mar de la palabra sensual y de amor.

Mariela Rodríguez Méndez. Máster en Sicología clínica