Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

I. G.: Llevo una relación de cinco años maravillosos. Dos de ellos tratándonos por infertilidad para poder hacer una familia juntos. Me mandaron un tratamiento a mí y ha sido efectivo, pues hace tres meses me operaron de un embarazo ectópico. El médico me dijo que podía tener familia, pero debía esperar un año antes de planificar otro embarazo. Ahora me da miedo tener relaciones sexuales con mi pareja y siento que la relación va desmoronándose. Él me da la fuerza que necesito y me ha apoyado cantidad, pero me da mucho miedo repetir esta experiencia. Él dice que tengamos fe, pero ya nada es como antes. No soy la misma. No quiero que mi relación de cinco años se acabe. Tengo 21 años.

No quieres que se acabe una relación de cinco años con la que nada es como antes. Entonces ¿qué deseas? ¿Qué ha cambiado? ¿Cómo encaminar tu vida en algo más que «hacer una familia»?

Llevan dos años tratándose por infertilidad. Habría que ver si hoy pueden encontrar algo más por lo cual tratarse como pareja. Si ya no es como antes y se pierde el incentivo que se tuvo cuando buscaban el hijo, tal vez sea oportuno analizar qué puede estar sucediendo; podría unirlos.

Esperar un año para volver a intentar el embarazo puede ser una contingencia muy favorable, en la que los métodos anticonceptivos te pueden ayudar. Ahora tienen la oportunidad de retomar su vida erótica sin ocuparse del perseguido embarazo. Tienen algún tiempo para repensar lo que en verdad desean el uno del otro. Pueden descubrir si hay otros proyectos comunes. Incluso podrías valorar si quieres a ese hombre aun si no pueden devenir padres. Hasta puedes tomarte un tiempo para hablar de estos temas con un psicólogo.