23
8va. Cumbre de las Américas Autor: Roberto Suárez Publicado: 09/04/2018 | 10:20 am
LIMA.- Una cálida velada dio la bienvenida a los cubanos participantes en los foros paralelos a la 8va Cumbre de las Américas, organizada por movimientos sindicales y populares de Perú.
El gesto fue reciprocado con una alegría y combatividad expresados por los cubanos en sus vivas a la amistad entre Cuba y Perú, y los cantos de exponentes de nuestra nueva trova como Adrián Berazaín, Eduardo Sosa y Pepe Ordaz; las décimas de poetas como Héctor Gutiérrez, y la contagiosa música de Elito Revé con su Charangón, que puso a bailar a los antillanos y a los amigos peruanos.
Foto: Roberto Suárez
Foto: Roberto Suárez
Foto: Roberto Suárez
Foto: Roberto Suárez
«Cuba siempre ha sido solidaria con nuestro país», respondió Gerónimo López Sevillano cuando la prensa cubana indagó sobre los motivos de esta muestra de aprecio y respaldo.
Secretario general de la Central General de Trabajadores del Perú, López Sevillano evocó a Fidel donando su sangre para los peruanos afectados por el terremoto terrible de 1970, que destruyó más del 90 por ciento del país, y la continua cooperación de Cuba con Perú mediante «la ciencia médica».
«Con Cuba tenemos una deuda. Siempre seguiremos respaldando al sistema revolucionario cubano», aseguró.
Como un adelanto de lo que se espera sean las próximas jornadas en el contexto de una Cumbre donde se auguran posiciones encontradas, habida cuenta de la influencia en ella de la desprestigiada OEA y de Estados Unidos, el embajador de Cuba aquí, Sergio González, se unió al espíritu de «respeto constructivo» que marca la presencia de los representantes de la sociedad civil cubana en los debates de los foros paralelos, pero enfatizó que ello «no impedirá denunciar, decir verdades».
«Anda en harapos el imperialismo a pesar de su ofensiva neoliberal, de su nueva vuelta sobre nuestras tierras… Se está refugiando en lo que le queda, la Doctrina Monroe».
Ese sentimiento antimperialista es compartido por los movimientos sociales y sindicales de Perú que han convocado a la Gran Marcha anunciada por ellos para el día 12, con la consigna de «Fuera Trump del Perú».
La llegada del mandatario, que pisará aquí, por primera vez como presidente, tierra latinoamericana, traerá a los suelos andinos un despliegue tan aparatoso como el Jefe de Estado: 114 miembros del Ejército y 454 pertenecientes a la Fuerza Aérea armados hasta los dientes con arsenal de primer nivel y helicópteros, describió hace unos días aquí el diario local La República.
Tal «salvaguarda» debió ser aprobada por el Congreso peruano, donde encontró la objeción de legisladores que la consideraron una medida extrema y alegaron que la seguridad de Trump podían garantizarla las fuerzas nacionales.
En igual sentido se pronunció López Sevillano, quien agregó que la marcha del jueves repudiará esa presencia militar foránea y el poder económico neoliberal, «que es excluyente, trae hambre y destruye la naturaleza y los movimientos populares».
«Hay un sentimiento de rechazo y de condena, dijo en torno a la llegada de Trump. En Perú no es bien recibido. Cuando ellos llegan a una cumbre oficial vienen a discutir cómo instrumentar políticas de exclusión, pero no a generar empleo con trabajo digno», expresó a los periodistas.
En ese sentido se pronunciará también la Cumbre de los Pueblos, que se organiza por los movimientos populares peruanos como expresión antagónica a los eventos de la Cumbre presidencial, y tendrá lugar del 10 al 14 de abril.
Líderes latinoamericanos como los presidentes Raúl Castro, Evo Morales y Nicolàs Maduro, y exmandatarios entre quienes se encuentran José Mujica, Rafael Correa y Cristina Fernández han sido invitados aunque no está confirmada su asistencia.
