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VARSOVIA, julio 8.— Los líderes de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) aprobaron formalmente este viernes, en la primera jornada de la cumbre que celebran aquí, el envío de cuatro batallones a Polonia, Estonia, Letonia y Lituania, así como asumir el mando y control del sistema de defensa frente a misiles balísticos.
Estos batallones «estarán reforzados y serán multinacionales» y demostrarán «el vínculo transatlántico», declaró en rueda de prensa el secretario general aliado, Jens Stoltenberg, quien advirtió que «un ataque a un aliado será considerado como un ataque a todos», según reportó EFE.
Stoltenberg confirmó que Canadá será la nación marco del batallón que se despliegue en Letonia; Alemania, del de Lituania; el Reino Unido, del de Estonia, y Estados Unidos, del de Polonia, y en Rumanía una brigada compuesta por efectivos rumanos y búlgaros.
En paralelo, los líderes declararon la capacidad operacional inicial del sistema de defensa de misiles balísticos, de manera que las embarcaciones estadounidenses basadas en España, el radar en Turquía y la sede del interceptor en Rumanía «pueden ahora trabajar juntos bajo el mando y control de la OTAN».
A pesar de que estas acciones reflejan la hostilidad de la Alianza hacia Moscú, Stoltenberg comentó: «Lo que hacemos es enteramente defensivo, un escudo frente a ataques de fuera del área euroatlántica», comentó Stoltenberg, quien acotó que ello no supone «ninguna amenaza para la disuasión nuclear estratégica de Rusia».
No obstante, señaló que la OTAN no buscará en ningún caso el «enfrentamiento». El próximo miércoles, en el Consejo OTAN-Rusia, informarán a Moscú las decisiones tomadas en la Cumbre.
