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Luego de más de dos meses de conversaciones entre las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP) y el Gobierno de ese país, las pláticas avanzan de manera positiva y por buen camino, según afirmó el delegado insurgente Iván Márquez, poco antes de comenzar este martes una nueva jornada de diálogo.
Se trabaja fuertemente y, como en ningún otro momento, «sentimos que avanzamos en la construcción de un acuerdo en torno a un tema que es importantísimo: el del acceso y uso de la tierra», recalcó el representante, quien recordó la propuesta para conformar un Fondo de Tierras que permita la distribución gratuita de parcelas a los campesinos que no poseen.
El acceso a la tierra y desarrollo rural integral, considerado la base del conflicto armado y social existente en Colombia, es el primer punto de la agenda de seis acordada para las conversaciones de paz, abiertas en La Habana desde el 19 de noviembre último.
Sobre este tema, las FARC-EP hicieron público un comunicado donde alertan sobre lo que llamaron «una nueva especialidad capitalista» que se configura en América Latina y el Caribe, de la cual —agregan— no escapa Colombia.
Se refieren así a la usurpación de la tierra por los «grandes inversionistas foráneos», lo que unido al latifundio que «durante décadas ha auspiciado el Estado» conllevan a la imposibilidad del pueblo colombiano, fundamentalmente a sus sectores rurales, del acceso y uso de grandes zonas agrícolas.
Esta acumulación de la tierra, dicen, adquirida a través del despojo «violento y legal», propulsan megaproyectos infraestructurales, de extracción minero-energética; la producción de biocombustiles y la implementación de bases militares, los que tienen como objetivo final el control de los recursos naturales como base de poder económico y político, advierten.
Contra todo esto, afirman las FARC-EP, se deberán seguir levantando voces y movilizaciones que multipliquen la lucha por la soberanía y la paz en Colombia.
En otro momento de su diálogo con la prensa, Iván Márquez recordó la ausencia en las conversaciones del guerrillero Simón Trinidad, —extraditado por Colombia a Estados Unidos, donde cumple condena. Una vez más «estamos reclamando su presencia necesaria en esta mesa para que contribuya con su experiencia al logro de la paz», sentenció.
Cuestionado sobre el tiempo que podrían permanecer las partes tratando el tema agrario, Márquez afirmó que no se puede calcular un lapso exacto porque «las discusiones hay que desarrollarlas con mucha responsabilidad, mirando todos los detalles, de manera tal que ambas delegaciones queden satisfechas con los resultados».
En ese sentido, el presidente colombiano Juan Manuel Santos se mostró esperanzado de que se podría alcanzar la paz en este 2013 si las FARC-EP «muestran voluntad», dijo al intervenir este martes en un acto realizado en Bogotá.
Márquez reafirmó la disposición del Secretariado Nacional de las FARC-EP de liberar, bajo el auspicio de la Cruz Roja Internacional y la organización Colombianos y colombianas por la paz, a dos policías y un soldado capturados durante acciones ofensivas la semana pasada.
«Habrá que esperar un poco el desarrollo de este hecho que con toda seguridad conducirá a la liberación de los prisioneros», afirmó.
Según reportó el diario El Tiempo, Santos autorizó el domingo se hicieran las gestiones para buscar que sean liberados.
