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Flota de guerra estadounidense Autor: AP Publicado: 21/09/2017 | 05:19 pm
TEHERÁN, abril 9.— Irán no aceptará condiciones previas antes de sentarse a negociar el próximo sábado en Estambul sobre su programa nuclear con las potencias del denominad Grupo 5+1 (los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la Naciones Unidas más Alemania), aseguró este lunes el ministro de Asuntos Exteriores iraní, Ali Akbar Salehi.
Las declaraciones de Salehi se produjeron al tiempo que Irán confirmaba la cita para una primera fase de conversaciones con el 5+1 en Estambul para el 14 de abril, que seguirá con una segunda ronda en Bagdad, en una fecha aún por decidir, reportó EFE.
El responsable de la diplomacia iraní defendió el derecho de su país al uso pacífico de la energía atómica y mostró su esperanza de que, con estas reuniones, las potencias despejen su «preocupación» por el programa nuclear persa, tildado por algunos, con Estados Unidos a la cabeza, de tener objetivos militares, a pesar de que la República Islámica asegura su carácter civil.
Según medios iraníes e internacionales, EE.UU. y otras potencias pretenden que Irán cese su producción de uranio enriquecido al 20 por ciento y cierre la instalación nuclear subterránea de Fordo, situada cerca de la ciudad de Qom, a unos 160 kilómetros al sur de Teherán.
Sin embargo, el director de la Organización de Energía Atómica de Irán (OEAI), Fereydun Abasi, dijo este lunes que la República Islámica mantendrá esa producción de uranio enriquecido solo en la medida de sus necesidades para atender su programa nuclear pacífico y no cerrará Fordo.
Abasi aseguró que si esta instalación está construida bajo tierra es para protegerla de posibles ataques, con los que han amenazado Israel, EE.UU. y el Reino Unido.
También recordó que Irán no produce uranio enriquecido a más del 20 por ciento, que se puede utilizar como combustible para reactores de investigación, industriales o de producción de energía. Se estima que para fabricar bombas atómicas se precisa disponer de uranio enriquecido a más del 90 por ciento.
Por su parte, el general Amir Ali Hayizade, comandante de la Fuerza Aeroespacial de la Guardia Revolucionaria, cuerpo élite de las Fuerzas Armadas iraníes, aseguró que su país se prepara para contrarrestar el escudo antimisiles proyectado por EE.UU. en el golfo Pérsico, parte de un cinturón de seguridad para Israel y dirigido contra la República Islámica.
Irán también considera que la instalación de un sistema de radares estadounidenses en Turquía, como parte del escudo antimisiles europeo de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), está diseñado contra el país persa, por lo que ha indicado al Gobierno de Ankara que su colocación es un «error estratégico».
EE.UU. también ejerce una permanente presión sobre Irán manteniendo dos portaviones con sus grupos de combate cerca del Golfo, según fuentes de la Marina norteamericana citadas por AFP.
El USS Abraham Lincoln y su escolta se encuentran al norte del mar de Omán, mientras que el USS Enterprise está en tránsito en el Golfo de Adén, dijo un portavoz de la Marina estadounidense, el capitán de corbeta John Fage.
Además, la potencia norteamericana busca emplear métodos de vigilancia masiva antes de emprender una acción militar contra Irán, según revelaciones de una fuente de inteligencia, filtradas al diario The Washington Post.
La Agencia de Seguridad Nacional está haciendo esfuerzos por incrementar operaciones de escucha contra altos funcionarios de Teherán, lo que se une a las operaciones de aviones teledirigidos de vigilancia (drones) que captan imágenes de satélite de las instalaciones nucleares iraníes, señala el diario, citado por PL.
Estas operaciones de espionaje contra el país persa comenzaron en los últimos años de mandato del ex presidente George W. Bush.
