Luego de un largo periplo en ómnibus de más de 1 680 kilómetros desde la capital mexicana, el equipo cubano llegó ayer por la tarde a Ciudad Obregón, donde hoy comienza su andar en la 3ra. Copa Mundial de béisbol sub-23.
Sin embargo, su arribo es menos accidentado que el del primer rival, República Dominicana, que solo cuenta en la sede con 14 jugadores y el cuerpo técnico, pues el resto no ha podido viajar debido a cuestiones de visado y tiene previsto aterrizar este jueves en horas de la tarde, según confirmó a JR, Juan Núñez, presidente de la Federación Dominicana de Béisbol.
«Con lo que tenemos allá vamos a jugar béisbol», dijo Núñez en el contacto a través de WhatsApp, asegurando que con ese grupo, entre quienes están los que viajaron desde Estados Unidos, saldrían al campo frente a la escuadra cubana en el choque inicial de la competencia, a la espera de que se complete la armada.
El resultado de ese partido posiblemente sea determinante en la clasificación para la superronda, pues ambos conjuntos, junto a México —anfitrión y vigente monarca de la categoría— y Taipéi de China lucen como los de más opciones para ganar los tres cupos.
Completan la llave Alemania y República Checa, últimos rivales de Cuba, domingo y lunes, por ese orden. En Hermosillo jugarán Venezuela, Nicaragua, Corea del Sur, Países Bajos, Colombia y Panamá.
El avance a la siguiente instancia, además de colocar a nuestro plantel en la ruta de las medallas, garantiza que Cuba no siga descendiendo en el ranking de la Confederación Mundial de Béisbol y Softbol, listado en el que actualmente ocupa el onceno puesto.