Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

Ver Más

Norge Carlos Vera, uno de los jóvenes más talentosos del grupo. Foto: Phil Selig Autor: Juventud Rebelde Publicado: 21/06/2019 | 06:03 pm

Por primera vez en sus tres incursiones en la Liga Can-Am, el equipo Cuba le gana más de un juego a los Capitales de Québec. Pero este no es un Cuba tradicional, ni los Capitales, dígase también, son los mismos de años anteriores.

La joven escuadra por la que apostó Rey Vicente Anglada para esta gira ya tiene cuatro éxitos, uno menos que todos los que consiguió la última selección insular que fuera invitada a esa liga norteña, en junio de 2017.

Aquella vez los Capitales barrieron en cuatro juegos a los cubanos y un año antes los habían doblegado en tres choques con un solo triunfo para los nuestros. En ambas ocasiones el club de Québec llegó a la postemporada y en 2017 fue el campeón. Sin embargo, de la nómina subtitular del año pasado apenas queda un jugador, el cubano Yordan Manduley. Eso justifica que ocupen ahora el último lugar en la etapa clasificatoria con saldo de 8-22.

Lázaro Blanco, quien jugó con ellos en las dos temporadas más recientes, confirma que el actual es un equipo menos fuerte, pero también dice que le ha impresionado el juego de sus compañeros jóvenes que se buscan un puesto en el conjunto que irá a Lima.

Sin embargo, más que por los triunfos, que en tiempos de tantas derrotas oxigenan, alumbran, levantan el ánimo de la afición, esta gira le ha dado, una vez más, la razón a Anglada, que mira mucho más lejos. Piensa en Tokio 2020, y allá no se llegará haciendo lo mismo de los últimos años, ni con la misma gente.

Le ha dado oportunidades a todos, ningún lineup es igual a otro, aunque hay turnos que se repiten, y es lógico, porque se buscan titulares. Otros tienen nombre, pero están en Japón, y es necesario probar probables suplentes.

César Prieto, por ejemplo, tiene las herramientas para convertirse en el primer bate. Cuando gane en disciplina en el home plate, agarrará más boletos y su OBP aumentará. Hace buenos contactos, tiene poder ocasional y anda con caja quinta en los senderos. Promedia .400 en seis juegos (8 hits en 20 veces al bate), con dos BB y tresK, y juega a ambos lados del segundo cojín.

Más oportunidades ha tenido Yoelkis Guibert como segundo en la tanda. El santiaguero tiene proyección y necesita juego para aprender a explotar bien sus habilidades en ese turno. No se embasado todavía por base por bolas y solo ha ligado cinco imparables en 26 turnos,con seis ponches.

Muy bien están con el madero tres habituales en las últimas selecciones nacionales: Raúl González, Carlos Benítez y hasta Yosvany Alarcón. Este último tiene de 15-6. Por debajo de sus potenciales anda Frederich Cepeda, no tanto por sus pocos hits, como por los seis ponches tomados. Inusual en él, uno de los hombres que mejor discrimina los pitcheos en Cuba.

La nueva hornada de lanzadores también ha mostrado potencial. Hay de todo, para integrar una rotación sólida que acompañe a los experimentados Lázaro Blanco y Freddy Asiel Álvarez, y disponer de un bullpen variado, profundo y taponeros de lujo.

De Norge Carlos Vera solo se habla elogios, aunque apenas haya lanzado. Basta con verlo sobre el box para aquilatar su talento. En Japón lo quieren fichar. Su recta de 95 millas por hora con un cuerpo al que le faltan kilos dice mucho.

Hoy es el séptimo juego de los cubanos de los 21 programados en la liga como parte de su preparación rumbo a Lima. Enfrentarán a Águilas de Trois-Rivieres, un rival que en las ediciones de 2016 y 2017 le ganó dos choques de cuatro a los conjuntos insulares y en la temporada actual tiene balance de 15 y 15.

Esperemos que el despunte ofensivo, incluso, de largo alcance de los juegos ante los Capitales, no haya sido algo ocasional o debido a la renovación de ese club. Aunque lo importante para los técnicos está detrás de los números. Y eso es lo que vale ahora. Par que después, en las competencias, los números sean los que hacen falta.

Compendio estadístico de Arnelio Álvarez