Dayron Blanco, el más rápido en la vuelta al cuadro en el Juego de las Estrellas, se queda en casa. Autor: Maykel Espinosa Rodríguez Publicado: 24/10/2018 | 09:24 pm
Aunque va siendo habitual que jugadores de gran rendimiento en la primera etapa de la temporada no sean escogidos como refuerzos, no deja de ser año tras año una mala noticia para esos atletas y para el béisbol cubano, que no está en condiciones de que muchachos con potencialidades, pero urgidos del juego diario, tengan, en el mejor de los casos, que ver la competencia desde sus casas.
Los menos experimentados son los que más riesgo corren. Por mucho que se esfuercen y compilen números de elogio en los 45 partidos del calendario preliminar, salen en desventaja a la hora de los fichajes.
En la bolsa quedaron nombres como el del pitcher pinareño Yaifredo Domínguez, el zurdo artemiseño Geonel Gutiérrez, o el que más partidos salvó, Alyanser Álvarez, de Mayabeque, con diez. Tampoco nadie llamó al lanzador granmense Joel Mojena, lo más notable del staff de los Alazanes.
Tendrán que colgar los bates o esperar para servir de recambio si hay bajas, que es lo menos probable, los cazadores Dayron Blanco y Yoan Moreno, el mayabequense Edaín Román y los santiagueros Yoelquis Guibert, Sergio Barthelemy y Gelkis Jiménez, por solo mencionar a algunos de los jóvenes que más necesitan jugar.
A Dayron Blanco no lo sorprendió que se quedara fuera. «Los directores escogen lo que más necesitan y generalmente se inclinan por atletas con experiencia, y yo solo tengo tres series.
«Tuve una buena temporada, gracias a la preparación que hice; estuve enfocado en erradicar los errores del campeonato pasado. Fui líder en carreras anotadas (45) y triples conectados (6) y tuve un promedio de .342, pero eso no bastó.
«Sé que tengo que mejorar el tacto, porque me ponché 24 veces. Ahora me voy a concentrar en esos aspectos técnicos para buscar más contacto con la bola, incluso en dos strikes debo acortar más el swing. Me seguiré preparando para estar en forma si me llaman en algún momento o si después me incluyen en preselecciones nacionales»
A la defensa, el ganador de la vuelta al cuadro en las pruebas de habilidades durante el fin de semana de las Estrellas, exhibe un gran desplazamiento y les llega con facilidad a los batazos.
¿Por qué no haber concebido una ronda especial y obligatoria de refuerzos con esos posibles talentos? Todos ellos sí necesitan jugar en nuestro campeonato la mayor cantidad de partidos posibles para lograr su desarrollo deportivo. El béisbol en Cuba, ahora mismo, está para pensar primero en su futuro y después en mover las fichas que tiene afuera.