Ora el insolente despojo, ora actuaciones no acordes con el tradicional nivel técnico, lo cierto es que Domadores de Cuba cedieron este sábado 3-2 ante los Otamans de Ucrania, en el Palacio de los Deportes de Kharkiv, en su tercera presentación en la VI Serie Mundial de Boxeo (WSB, siglas en inglés).
La primera derrota no lo fue. El subcampeón mundial Yosbany Veitía (52 kg), a pesar de no mostrar su mejor tono sobre el ring, jamás perdió 2-1 (49-46, 50-45 y 48-47) contra el fogoso Maksym Fatych. El espirituano fue más preciso en su golpeo y defendió bien todas las andanadas de golpes que le tiró el rival, quien estuvo mucho tiempo metiendo la cabeza y jamás fue penalizado. Luego, al triple campeón mundial Lázaro Álvarez (60) no le gustó el abuso con su compañero y, para no verse en similar peligro, decidió marcar el ritmo al darle revancha a Viktor Slavinskyi, su víctima de la pasada V WSB. Lo mantuvo a distancia con su jab, le pegó muchos swinnes efectivos al rostro y lo venció 2-0 (doble 50-44). Y no fue 3-0 porque el juez marroquí Ammour Abderahim, quien se «ensañó» con los cubanos en esta jornada, vio la pelea igualada 47-47.
Con el match 1-1, el campeón olímpico Roniel Iglesias (69) cayó 1-2 (48-47, 49-46, 47-48) ante el desconocido Sehii Bohachuk. El pinareño ganó sin contratiempos los dos primeros asaltos, acosando al rival y metiendo bien sus manos. Pero mostró agotamiento y eso le costó ciertas imprecisiones en su golpeo en los tres rounds restantes, aprovechadas por el local para tomar el ritmo del combate. Roniel perdió, pero lean esto: uno de los jueces que lo vio ceder fue el marroquí Abderahim.
Así, con el duelo 2-1 favorable a los Otamans, el también tricampeón del orbe Julio César La Cruz (81) le dio una clínica de boxeo a Matsym Kots y lo venció 3-0 (doble 50-44 y 50-45). Su velocidad de manos y piernas, la espera del fallo del rival para ir al contraataque y sus potentes rectos de derecha, no dejaron margen a dudas… ni siquiera a Abderahim, quien también hizo de juez.
Pero con el duelo empatado 2-2, Leinier Peró (+91) se distanció mucho de su tradicional ABC boxístico, estuvo muy lento y no supo llegar con efectividad al rostro de su rival Rostyslav Arkhypenko, quien lo superó 2-1 (47-48, 49-46, 48-47). El camagüeyano cayó… y sí, ya sé que ustedes deben imaginarse que Abderahim también dictó sentencia en esa pelea.
Con este, su tercer triunfo consecutivo, los ucranianos pasaron a comandar el grupo A con nueve puntos, por delante de Cuba, aunque ambos poseen similar balance de 12 victorias y tres derrotas.